El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha insistido este domingo en su propósito de convocar la consulta soberanista en Cataluña aunque el Gobierno español "no quiera negociar", mientras ha advertido a Mariano Rajoy de que "está perdiendo una ocasión de oro" de sentarse a dialogar.

"Aunque las instituciones del Estado no quieran sentarse en la mesa, no quieran negociar ni llegar a acuerdos y no nos quieran transferir la competencia para organizar el referéndum, el pueblo catalán será igualmente llamado a esta consulta", ha asegurado Mas en declaraciones en Vilassar de Mar (Barcelona), donde ha inaugurado una feria organizada por el Mercado de la Flor. El sector ha aprovechado la ocasión para trasladar a Mas su preocupación por el aumento del IVA del 8 al 21 % y su efecto en las ventas, así como la necesidad de impulsarlo para garantizar los puestos de trabajo vinculados.

"Yo la consulta la convocaré", ha reiterado el presidente catalán, quien ha añadido que preferiría convocarla de acuerdo con el Estado y el Gobierno español. En respuesta a las declaraciones de Rajoy, quien el sábado afirmó que no habrá referéndum en Cataluña y que "luchando contra el mundo no se gana", Mas ha asegurado que Cataluña "no lucha contra el mundo" con su intención de llevar a cabo la consulta.

"El mundo es más grande que España y nosotros luchamos contra el Estado español, no contra el mundo. Además, no nos gustaría ni luchar contra España porque, si nos hubieran respetado nuestras aspiraciones de autogobierno, nuestra cultura, nuestra lengua, no sería necesario hacer lo que estamos haciendo", ha afirmado Mas.

El presidente ha asegurado: "luchamos contra el Estado español porque no tenemos más remedio. Contra el mundo no queremos luchar, todo lo contrario, queremos situarnos bien en el mundo, ser conocidos, ser reconocidos y, muy modestamente, hacer una aportación al mundo entero de nuestra identidad y nuestra personalidad catalana".

"Lamento que el Gobierno español y Mariano Rajoy estén perdiendo una ocasión de oro para poder sentarnos en una mesa y negociar precisamente a partir de que el Parlament de Cataluña pidiese organizar la consulta", ha continuado el presidente catalán. Ha lamentado que vean "como un obstáculo" la intención de celebrar una consulta, cuando "la actitud de las instituciones catalanas es dialogar y llegar a acuerdos", pero es imposible llegar a acuerdos con "aquellos que se niegan a sentarse sistemáticamente".

Artur Mas ha recordado las ocasiones perdidas: la primera cuando recurrieron el Estatut en el Constitucional, otra cuando se opusieron a negociar el pacto fiscal, y ahora "vuelven a perder otra ocasión cuando ni quieren sentarse en la mesa para acordar el proceso que ha de llevar a Cataluña a su futuro". En cualquier caso, convocará la consulta el próximo 9 de noviembre "a través de las leyes catalanas propias que, a través del Parlament, sirvan para hacer una consulta, aunque no sea un referéndum. Al fin y al cabo, con una consulta popular también sabremos la opinión de los catalanes".