La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha anunciado que la ley está dirigida permitir el cambio de nombre y sexo en los documentos de identidad de los transexuales, aún cuando éstos no se hayan cambiado de sexo quirúrgicamente.

De la Vega hizo estas manifestaciones durante un coloquio organizado en la sede del PSOE con colectivos sociales y ONG, para hacer balance del primer año de Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

Respondía así a la petición que le había hecho la presidenta de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays y Transexuales, Beatriz Gimeno, quien reivindicó el derecho de los transexuales a acceder a la igualdad, y pidió al Gobierno que "no flaqueara" ante la "polémica artificial" suscitada en torno a la ley de matrimonios homosexuales.

La vicepresidenta consideró que el debate es bueno a pesar de "las cosas que uno tiene que oír" y aseguró: "no nos van a parar ahí, vamos a seguir", "porque es un compromiso que responde a una convicción y a un acto de justicia".

Para la también portavoz del Gobierno resulta "tremendo" que se pueda apostar por la igualdad de derechos de los homosexuales, pero dando a esas uniones otro nombre.

A su juicio, la polémica en torno a este asunto es la misma que se originó con la ley del divorcio, que cuando se aprobó en 1981 "parecía que se hundía España, hubo llamamientos a la objeción de conciencia, pero luego no pasó nada". +

La vicepresidenta se mostró convencida de que la polémica acabará y "todo el mundo verá con normalidad" el matrimonio entre personas del mismo sexo.

En respuesta a preguntas de representantes de colectivos que luchan contra el sida, Fernández de la Vega reconoció que se trata de un "auténtico problema social" y reivindicó la necesidad de la educación sexual, y consideró que "hay que volver al póntelo, pónselo", porque en los últimos años ha habido una regresión en las políticas de información sobre prácticas sexuales sanas.

También hizo referencia a las medidas que se van a adoptar en materia de células madre, y aseguró que la nueva ley de reproducción asistida, que "definitivamente va a permitir la investigación" está a punto de aprobarse en el Consejo de Ministros. Anunció para antes de fin de año el proyecto de ley de investigación en biomedicina.

Al escuchar las reivindicaciones de mujeres gitanas, la portavoz defendió el derecho a la educación de este pueblo y abogó por "un pacto de estado por la educación estable, de calidad, que no excluya a nadie y no discrimine".

Respecto a la ley de dependencia, Fernández de la Vega confió en que en el otoño llegue al Parlamento y aseguró que se trata de "uno de los retos fundamentales del Gobierno".

Se dirigió a todas las organizaciones presentes para asegurarles que el Gobierno trabaja en un reglamento de la ley de asociaciones, y les anunció también que se plantea una regulación específica de las subvenciones dirigidas a las Organizaciones No Gubernamentales.