El Pleno del Consejo de Alumnos de la Universidad de Sevilla (Cadus) tratará a partir de las 16,30 horas de este martes la proyectada ampliación del sistema de estacionamiento de pago en superficie mediante el método de la zona azul, al objeto de evaluar la afección, plantear un posicionamiento y ofrecer ideas con las que intentar minimizar el impacto de esta medida para la comunidad universitaria. Asimismo, también se abrirá un debate sobre la aparición de algunos brotes de carácter fascista en el entorno de la Hispalense.

El portavoz del Cadus, Alfonso Torres, ha expuesto a Europa Press que, en concreto, sin existir aún propuestas cerradas, sí se barajan dos alternativas principales, siendo la primera de ellas la habilitación de un bono para que los universitarios tengan la consideración de residentes, que por medio de una acreditación de esta condición ven abierta la posibilidad de aparcar en condiciones más ventajosas.

"La mayoría pasamos más tiempos en la facultad que en nuestra propia casa", argumenta Torres, que, asimismo, alude a otra posible medida, como es el estudio de que en los entornos de mayor tránsito universitario dentro del nuevo plan de zona azul se pueda trabajar con el margen existente de tal forma que algunas calles se descarguen y el sistema pueda pasar a otras, "siempre sin perjuicio de otros colectivos vecinales o laborales y cuidando de que finalmente no quede ninguna zona sobrecargada".

A priori, con el nuevo plan, la mayor afección en este sentido estaría en la Cartuja, sede de la Facultad de Comunicación y la Escuela de Ingenieros; el campus de Ramón y Cajal y, en menor medida, el de Reina Mercedes, por la implantación en la cercana barriada de Bami. Y es que, ha agregado el portavoz del Cadus, con la configuración actual de zona azul no existen puntos especialmente conflictivos al respecto.

Ante los posicionamientos en contra de la expansión de la zona azul por parte de las Asambleas de Estudiantes de la Escuela de Ingenieros y la Facultad de Comunicación, las 25 delegaciones de estudiantes debatirán sobre esta decisión del Consistorio, respecto a la cual el organismo está estudiando presentar alegaciones.

Respecto al otro punto, Torres ha subrayado que se pretende analizar la situación para dilucidar "si es un asunto preocupante o anecdótico y, si el Pleno lo considera oportuno, tomar algún tipo de posicionamiento, en función del cual se realizarían o no acciones".

La introducción de este asunto se debe, por un lado, a la petición expresa de la Asamblea de Estudiantes de la Facultad de Comunicación de introducir un punto en el debate contra el fascismo en las aulas, y, por otro, a la detección de incidentes puntuales, como la agresión a un delegado en la huelga del 9 de mayo.

"Hay simbología que ahora se ve con más frecuencia: como representantes de los estudiantes, queremos evaluar si es algo que esté adquiriendo suficiente entidad como para que tengamos que tomar medidas de algún carácter o algo anecdótico y marginal que no requerirá ningún posicionamiento", ha manifestado el portavoz del Cadus, que, con todo, ha recordado que "sí que han ocurrido hechos que nos urgen a abordar el tema".