Un grupo de trabajadores de Radio Televisión Valenciana (RTVV) permanece en la delegación de Castellón a la espera de ser desalojados de las instalaciones. Los empleados, entre lágrimas, han mostrado su "malestar y tristeza" después de que el ente haya ido a negro por decisión de la Generalitat, con gritos de 'Fabra dimisión y el otro a la prisión'.

Algunos trabajadores de NOU Ràdio han acudido de madrugada al edificio para dar su apoyo a los compañeros de televisión que todavía seguían emitiendo y recoger algunos objetos. A pesar de que efectivos de la Policía Autonómica se han personado en las instalaciones a primera hora de la mañana, los trabajadores han podido acceder sin problemas.

Han sido muchas las personas que se han acercado hasta la delegación de Castellón para dar su apoyo a los trabajadores, entre los que se encontraba un grupo de estudiantes de periodismo de la UJI y algunos representantes de los partidos de las oposición, como la diputada autonómica de EUPV, Marina Albiol, o el portavoz de Compromís en la Diputación, Enric Nomdedéu.

La diputada de EU ha mostrado su "sentimiento de rabia y de indignación" y ha asegurado que "es el momento de mostrar toda nuestra solidaridad con los trabajadores porque están, no sólo defendiendo sus puestos de trabajo muy dignamente, sino que además están defendiendo un servicio público, unas señas de identidad, el derecho que tenemos todos a la información y que al pueblo valenciano no se le puede acallar la voz".

Por su parte, el portavoz de Compromís, Enric Nomdedéu, ha explicado que "cuando decidí dedicar parte de mi vida a defender los servicios públicos no esperaba tener que defenderlos contra este gobierno democrático", y ha añadido que "la batalla judicial no acaba aquí".