Efectivos de la Guardia Civil de Borox y Esquivias han detenido a J.S.G., M.A.R.A., de nacionalidad española y O.M.C., de nacionalidad rumana, por un delito de robo con fuerza en las cosas, en grado de tentativa, cometido en una empresa de la localidad de Borox (Toledo), de la que es trabajador el último de los detenidos.

Según ha informado la Delegación del Gobierno en nota de prensa, la Central Operativa de Servicios de la Guardia Civil de Toledo comunicó a una patrulla de este Cuerpo, sobre las ocho de la tarde del día 19 de octubre, que se había activado el sistema de alarma de una empresa ubicada en un polígono industrial de esa localidad.

Esta patrulla se desplazó hasta el lugar y observó la presencia de un vehículo estacionado junto a la instalación, en cuyo interior se encontraba una persona que intentó ocultarse de los agentes al apercibirse de la presencia policial.

Los integrantes de la patrulla que estaban identificando a este hombre, que responde a las iniciales de M.A.R.A., observaron que no dejaba de recibir llamadas en su teléfono móvil y comprobaron que la puerta trasera de acceso a la nave había sido forzada.

Los integrantes de esta patrulla de la Guardia Civil de Borox y de una segunda patrulla, perteneciente al cuartel de Esquivias, localizaron a dos hombres agazapados entre el terreno y la maleza que existe detrás de esta instalación, que fueron identificados como J.S.G. y O.M.C., éste último trabajador de esta empresa y conocedor de los horarios de trabajo y del material que había en el interior.

La Guardia Civil detuvo a estas tres personas, de edades comprendidas entre 20 y 21 años, por un delito de robo con fuerza en las cosas, en grado de tentativa, poniéndolos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Illescas.