La fiscal del caso abierto por la muerte de la jugadora holandesa de voleibol Ingrid Visser y de su pareja, Severein Lodewijk, ha pedido hoy el sobreseimiento respecto de Evedasto Lifante, propietario del club español donde militó aquélla, y a Rosa María Vázquez, la mujer que se encargó de alquilar la casa donde fue cometido el doble crimen.

En el transcurso de la vista celebrada en el Juzgado de Instrucción de Molina de Segura (Murcia) que investiga los hechos, las defensas de todos los imputados han pedido igualmente el archivo del caso, al señalar que no existen pruebas de su autoría. El Ministerio fiscal ha expuesto durante esta comparecencia, en la que estaban presentes los seis imputados (cuatro de ellos, en situación de prisión preventiva9, que de lo actuado hasta ahora no se deducen indicios de entidad suficiente como para considerar acreditada la participación de Lifante.

Respecto a Vázquez, ha señalado que aunque como ella tiene reconocido ante la Policía y en el propio Juzgado que se encargó de alquilar la casa, lo hizo por ser vecina de la zona y por encargo de Juan Cuenca, imputado en la causa, y sin que conociera el propósito de acabar con la vida de Visser y Lodewijk en el inmueble.

Por otra parte, ha adelantado su propósito de acusar a Cuenca y a los dos presuntos autores materiales de las muertes, Ion Valentin y Constantin Stan, como autores de dos delitos de asesinato.En cuanto a Serafín de Alba, propietario de la finca donde fueron enterrados lo cadáveres, ha señalado que lo considera encubridor del doble crimen y ha recordado que la Fiscalía tiene planteado un recurso para que se acceda a su puesta en libertad previo depósito de una fianza de 18.000 euros.

El letrado Melecio Castaño, que asumió recientemente la defensa de Valentin y Stan, ha pedido el aplazamiento de la vista celebrada este viernes, alegando que no ha tenido tiempo suficiente para conocer toda lo instruido hasta ahora, a lo que la jueza no ha accedido.

Asimismo, Castaño ha planteado un incidente de nulidad de actuaciones señalando que, respecto a Stan, se ha producido indefensión al no haber dispuesto de un intérprete en la prisión y desconocer, por tanto, el contenido de la causa y de qué se le acusa.

La acusación particular, ejercida en nombre de las familias de las víctimas, ha indicado que se propone dirigir su actuación contra los seis imputados.

Durante la comparecencia, todas las partes han pedido la práctica de numerosas diligencias testificales y periciales, sobre las cuales las magistrada deberá resolver en los próximos días.