Las calles de Madrid están sucias. Lo que en principio podría parecer una impresión subjetiva de algunos madrileños ha acabado convirtiéndose en una visión compartida por un gran número de ciudadanos. La suciedad acumulada en Madrid comenzó siendo denunciada por los propios trabajadores de los servicios de limpieza; a continuación, fueron las asociaciones de vecinos y de comerciantes quienes alertaron públicamente del deterioro de la ciudad; a ellos los siguieron los ciudadanos particulares a través de las redes sociales y los partidos de la oposición municipal. Este periódico se hizo eco de muchas de estas denuncias. Tras la publicación, decenas de lectores y vecinos han enviado sus fotos y comentarios, en los que declaran su indignación por la suciedad en las calles.

"El centro es la cara de Madrid, la parte con la que se quedan los turistas, nuestra carta de presentación. Lo que ahora ven es suciedad y situaciones como tomarse un chocolate en San Ginés rodeados de basura", lamenta el lector Pablo Gómez en un correo. La falta de limpieza ha llegado hasta el punto de que los barrios céntricos (tradicionalmente mejor cuidados) también están sucumbiendo a la dejadez. Un ejemplo de ello lo cuenta María del Río, que reside junto a la Plaza de España: "Los contenedores de reciclado están permanentemente a rebosar. Y no solo eso. La basura se expande en una suerte de vertedero que invade la acera".

En cualquier caso, esta lectora reparte responsabilidades: "La culpa es tanto de los comerciantes que desparraman los desperdicios, como de los vecinos, que no tienen el tacto de volverse a subir la basura a casa cuando ven esa montaña de mierda. Y no me olvido del Ayuntamiento, que, sabiéndolo, permite que [...] la zona dé auténtico asco". Otros ciudadanos también señalan a los residentes incívicos como responsables: "El poco civismo demostrado en la capital se ve día a día. Al igual que nos quejamos de la falta de limpieza, lo primero sería pensar que la calle es de todos y que tenemos que cuidarla", dice Alfonso Fernández.

La suciedad está trayendo consecuencias sobre la higiene, según alertan varios ciudadanos. "En Madrid ya se ven hasta ratas, es una vergüenza con lo que estamos pagando que no se vea un barrendero por ninguna parte", cuenta antoniomarmoreno en un comentario de la web. "Se te van pegando los pies de los meados de perros y basuras por todas partes", añade después una lectora que se hace llamar salakatxa. "Pasearse por Bravo Murillo da auténtico asco, no he visto calle más sucia en mi vida. El mayor motor de la economía española siempre ha sido el turismo y la capital del país está de pena", comenta Ayrim.

En definitiva, pocos rincones de Madrid se salvan de la escasa limpieza. Ramón Rodríguez destaca la suciedad en la estación de Atocha. Susana Balade envía fotografías de bolsas de basura tiradas por la calle en Usera, una situación que "no es un hecho puntual; es a diario". Gael Roger se fija en contenedores rodeados de desperdicios en Chamberí. Ivan Donaire cree que todo empezó a peor "desde que se quitó el recoger los cubos amarillos todos los días". Mientras, un lector con el seudónimo Eternal Flame denuncia que no hay bolsas para cacas de perro "en pleno centro de Madrid, por la zona de Conde Duque". Y concluye: "No quiero ni pensar cómo estará lo demás".