España dice que flota dispuesta a ir a Mauritania lo hace por "desesperación" y pide al PE que rechace acuerdo

El secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, ha pedido este martes al Parlamento Europeo que vote en contra de la ratificación del acuerdo pesquero negociado entre la Unión Europea y Mauritania porque considera que ha sido "mal negociado", al tiempo que ha opinado que los buques españoles que han expresado su intención de volver al caladero lo hace por "desesperación o por falta de alternativa".

El secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, ha pedido este martes al Parlamento Europeo que vote en contra de la ratificación del acuerdo pesquero negociado entre la Unión Europea y Mauritania porque considera que ha sido "mal negociado", al tiempo que ha opinado que los buques españoles que han expresado su intención de volver al caladero lo hace por "desesperación o por falta de alternativa".

"Que algunos segmentos muy perjudicados se vean obligados a ir a faenar por desesperación o por falta de alternativa no quiere decir que estén contentos con la negociación", ha declarado a la prensa en Bruselas, a donde ha viajado para pedir a los eurodiputados que el próximo martes, cuando deberán votar la ratificación del pacto pesquero, voten en contra.

El Gobierno español se ha quejado desde el fin de las negociaciones dirigidas por la comisaria de Pesca, Maria Damanaki, de que el régimen acordado había sido "mal negociado" porque no resultaba rentable para la flota europea y porque cerraba el acceso a recursos de interés para España, como el cefalópodo.

Los contactos mantenidas por la Unión Europea hace dos semanas con Mauritania, en el marco de una comisión mixta, han permitido una serie de "mejoras" para el lado europeo que, sin embargo, no convencen a España, porque sigue sin haber posibilidades de pesca para el pulpo.

Con todo, atuneros, palangreros, merluceros y marisqueros españoles han manifestado que "no entienden" el rechazo del Gobierno a pedir la ratificación del acuerdo tras las mejoras, según ha informado Cepesca.

Preguntado por la división en la flota española, Domínguez ha negado tal división y ha asegurado que los buques dispuestos a regresar al caladero lo harán para "probar, por si acaso les resulta mejor ir a trabajar que quedarse en puerto". "Respetando las decisiones de cada empresa, respetando la situación de precariedad, no creemos que podamos decir que estamos satisfechos con el resultado", ha insistido.

El secretario general de Pesca ha explicado que esta negociación puede condicionar negociaciones futuras tanto con Mauritania como con otros países terceros y por ello preocupa el "efecto que este malísimo acuerdo" pueda tener en otros convenios pesqueros.

Consciente de las dificultades para sumar apoyos en el Hemiciclo europeo, Domínguez ha mantenido reuniones con eurodiputados españoles para pedir su apoyo a la posición del Gobierno e instarles a "hacer un trabajo de proselitismo y convicción" a sus colegas de otros Estados miembros. El pleno puede aprobar o tumbar el acuerdo, pero no modificarlo

"Es difícil, porque las modificaciones recientes pueden dar lugar a una mayor utilización del acuerdo y que por ello haya eurodiputados que consideren que hay un mayor grado de satisfacción", ha explicado, para después subrayar que, pese a todo, el acuerdo es "insatisfactorio" para todos. GALICIA,

En contra

En su visita a la sede del Parlamento en Bruselas, Domínguez ha estado acompañado por la conselleira do Medio Rural e do Mar de la Xunta, Rosa Quintana, quién también se ha colocado en contra de la ratificación del acuerdo, por los perjuicios que supone para la flota gallega.

"Es un mal acuerdo que cuesta demasiado dinero a los ciudadanos de la Unión Europea y que, a cambio, su contrapartida (para la flota) es cero", se ha quejado Quintana en declaraciones a la prensa tras una reunión con eurodiputados del Partido Popular y previas a otros encuentros con representantes del PSOE, UPyD y Los Verdes.

La conselleira gallega ha recalcado que no cree que las mejoras que negoció la Comisión Europea hace un par de semanas en Mauritania hayan conseguido que "ninguna flota salga beneficiada", aunque haya algunos buques que "vayan a ir a probar", presionados por un largo periodo amarrados a puerto.

La flota cefalopodera gallega es la más afectada por este acuerdo ya que se le cierra un caladero al que sí tenía acceso en el pasado y con unos argumentos que no dan por buenos. "Nos dicen que Mauritania es soberana si no quiere que la flota acceda al recurso del cefalópodo, pero vemos que flotas de otros países están accediendo a la extracción de este recurso, que luego entra en los canales de comercialización de la UE", lamenta la representante gallega.

En este sentido, Quintana ha recordado que el Instituto de Oceanografía Español ha aportado datos que acreditan la "buena situación" del pulpo en aguas mauritanas y ha lamentado que el Ejecutivo comunitario no haya hecho esfuerzos por aportar esta información a la mesa de negociación.

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