Entre el 15 y el 20 por ciento de la población gallega mayor de 65 años vive sola, según la Sociedade Galega de Xerontoloxía e Xeriatría, cuyo presidente, José Carlos Millán, destaca que se trata de "estimaciones". No obstante, remarca que supone un porcentaje "superior" a otras comunidades autónomas aunque con "diferencias" entre el ámbito urbano y el rural.

Mientras, un estudio de la Consellería de Traballo e Benestar sobre las necesidades de personas mayores que viven solas, concluye que, entre los servicios más solicitados para seguir viviendo en su casa, está la ayuda en el hogar (19%) y la compañía en general (14%). Mientras, solo un 1% pide un centro de día o residencia de mayores . En la encuesta, un 61% reconoce que no le gusta vivir solo.

En declaraciones a Europa Press, el presidente de la Sociedade Galega de Xerontoloxía e Xeriatría, José Carlos Millán, remarca que "no hay datos fiables sobre la población de mayores que vive solo", aunque puntualiza que los datos que se barajan es en torno a 100.000 personas en Galicia en esta situación.

Por ello, para conocer la situación de este colectivo, y de las personas mayores en general, aboga por la elaboración de un 'mapa sociosanitario de la población anciana gallega' "porque no es que vivan ya solos, sino si lo hacen en condiciones adecuadas", apostilla.

Prevención de la demencia

Como ejemplo, señala la necesidad de actuar para prevenir los casos de demencia y, al hilo de ello, alude a los datos, de un estudio realizado por la Univeridade da Coruña (UDC) en el municipio coruñés de Narón entre 600 mayores en 2002.

En él, se constató "que uno de cada 4 presentaban deterioro cognitivo", ha precisado Millán, que ha apuntado que, de ese 25%, pueden tener demencia entre un 10 y un 15%. "Por eso es importante intervenir", señala sobre una enfermedad que afecta al 10% de la población mayor de de 65 años y sobre las técnicas actuales de detección precoz de la misma.

Entorno rural y urbano

En cuanto al perfil de las personas que viven solas, Millán destaca que el porcentaje de mujeres es "mayor", vinculado al hecho de que presentan también más esperanza de vida. "Hay una diferencia de casi 6 años en Galicia", apunta. Además, incide en las diferencias entre el rural y el urbano.

"En el urbano, les es más fácil conocer los recursos de proximidad y hay una mayor red pública de apoyo", apunta. Por el contrario, asegura que el rural tiene la desventaja de que esta población está "más lejos" de los servicios públicos, pero destaca que cuentan con "el apoyo entre vecinos, que es más intenso", apostilla.

RECORTES

Con todo, insiste en que "vivir solo no tiene que ser un hándicap". "Lo que hay es que valorar en qué condiciones están, ver sí tienen los cuidados de salud correctos", reitera al admitir que es "complicado" que los recursos municipales lleguen "al 100%" de este colectivo. Sobre esta cuestión, advierte de las consecuencias que pueden tener los recortes en prestaciones sociales y sanitarias.

"Es un error tremendo", sostiene este experto, quien, por otra parte, reclama que se promueva un "observatorio" para detectar los casos de personas que viven solas "en malas condiciones" y valorar "qué recursos necesitan", apunta en relación a posibles alternativas como la teleasistenica, los apartamentos tutelados o las viviendas comunitarias.

EL 53%

Se vale por si mismos

Por otra parte, un estudio de la Consellería de Traballo e Benestar realizado entre 657 personas de Galicia y 20 de Portugal que viven solas, facilitado a Europa Press, concluye que el 61% reconoce que no les gusta vivir solos, aunque casi el 97% mantiene relación con familiares y amigos.

Entre otras conclusiones, el informe, realizado para conocer las necesidades de este colectivo, recoge que el 53,6% de los encuestados son capaces de valerse sin necesidad de ayudas externas, el 30% cuenta con ayuda de familiares y el 14,5% con empleados del hogar.

El estudio subraya que es "más habitual que los mayores que viven en ayuntamientos de menor población sean los que necesitan más ayuda, destacando las de los familiares". En los de más de 20.000 habitantes, el porcentaje de personas que no la necesitan supera el 60%.

Por otra parte, un 85% de los encuestados dice no tener problemas para atender llamadas de teléfono y prácticamente la totalidad maneja el dinero "sin dificultad". El 37%, no obstante, prefiere que les acompañen al médico al ser preguntados si comprenden las instrucciones que les dan.

Necesidades en el hogar

En cuanto a las necesidades a nivel físico en el hogar, la mayoría es capaz de ocuparse de su cuidado personal, ducharse e ir solo al baño aunque, en general, presentan más dificultades los hombres. Por otra parte, ante una incidencia, el 95% afirma que mantiene la serenidad y pide ayuda.

En la encuesta, más de 1 de cada 4 personas reconoce tener problemas para usar el transporte público, mientras que el 99,4% afirma no necesitar transporte adaptado.

El estudio constata, además, la baja participación en centros por parte de este colectivo. Así, más de la mitad de los encuestados no son usuarios de ningún centro o asociación de personas mayores, porcentaje que se eleva hasta el 78% en los ayuntamientos pequeños. Pese a ello, casi el 46% participa en actividades socioculturales.