Mario Balotelli está de nuevo en el ojo del huracán mediático en Italia después de que esta semana dejara plantada a la ministra italiana de Integración, Cécile Kyenge, en un acto sobre la integración en el país transalpino al que sí acudieron varios de sus compañeros de selección.

En el acto, que se llevó a cabo en Turín, se esperaba la presencia del delantero del AC Milan, habida cuenta de que es de origen africano como la ministra y de que es un personaje muy sensible al racismo en Italia, lacra que también ha afectado a la titular de Integración, a la que incluso llegaron a lanzar plátanos.

Fue la propia Kyenge la que reveló al diario deportivo milanés La Gazzetta dello Sport el motivo de la ausencia de Balotelli: "Él mismo me dijo por qué no acudió. Ha preferido dormir, viendo que la presencia en el acto no era obligatorio. Tengo que agradecerle su sinceridad y su transparencia".

Balotelli le quitó hierro al asunto en unas declaraciones recogidas por el mismo medio: "Ya la conozco (a Kyenge), la veré en el futuro. No era un encuentro obligatorio. Estaba durmiendo como muchos otros de la selección. No hay ningún caso y considero que la polémica que alguno ha querido construir alrededor es una estupidez".