La Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente ha abierto un segundo plazo para presentar solicitudes de ayuda, certificación y pago relativas a actuaciones de reestructuración y reconversión de viñedo realizadas en el marco de planes ya aprobados en convocatorias anteriores para, de esta forma, cubrir las necesidades del sector en este ámbito. La Resolución de convocatoria, publicada este miércoles en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), establece un nuevo plazo para presentar las solicitudes abierto actualmente y que concluye el próximo 6 de septiembre.

Tras una ampliación de cerca de 113.500 euros de la asignación financiera inicial dirigida a estas subvenciones, el presupuesto total asignado al sector del viñedo para este año 2013 supera los cinco millones de euros, ya que esta nueva cantidad se suma a los 4,9 millones abonados ya a los beneficiarios en el marco de la campaña 2012-2013. Estas subvenciones están financiadas a través del Fondo Europeo Agrícola de Garantía (Feaga).

El incremento de la financiación destinada a estas ayudas ha permitido a la Junta de Andalucía abrir una segunda convocatoria para actuaciones incluidas en planes aprobados y no solicitadas previamente así como incrementar el porcentaje de subvención de los expedientes pagados en la convocatoria de abril. Este aumento, que se realiza de forma automática por parte de la Administración regional, alcanza el 75 por ciento en el caso de los planes colectivos y el 63,75 por ciento para los planes individuales.

Entre los objetivos de estas ayudas se encuentran el impulso al desarrollo del sector vitivinícola mediante la diversificación de la estructura varietal y la adaptación de la producción a la demanda de los mercados, logrando con ello una mejora de la estructura productiva de las explotaciones.

La reconversión varietal, la reestructuración del viñedo y la transformación de vaso a espaldera son algunas de las actividades subvencionables a través de esta línea de ayudas a las que se suman otras actuaciones dirigidas, por ejemplo, a mejorar las técnicas de gestión.

Sin embargo, las acciones que comprenden una renovación normal del viñedo por llegar al final de su vida natural o aquellas iniciativas por las que se han concedido ayudas en la última década no son susceptibles de recibir este respaldo económico. Éste es también el caso de los viñedos instalados tras lograr una concesión para nuevas plantaciones.