La Guardia Civil ha detenido en Córdoba a un varón de 43 años de edad, vecino del municipio de La Carlota, como supuesto autor de 14 robos con fuerza en las cosas, en los que resultaron afectados 84 centros de transformación de energía eléctrica, ubicados en polígonos industriales de Córdoba, Jaén, Málaga, Sevilla y Albacete.

Según ha informado el Instituto Armado, la Guardia Civil tenía conocimiento desde primeros de enero de que en centros de transformación de electricidad, ubicados en polígonos industriales de Córdoba capital y provincia, se estaban registrando delitos contra la propiedad, concretamente robos con fuerza en las cosas, en los que el objetivo principal del autor era extraer el cobre de dichos transformadores.

Las inspecciones oculares efectuadas en los distintos lugares donde se fueron cometiendo los robos permitieron a la Guardia Civil saber que todos ellos habían sido cometidos con un 'modus operandi' similar, que básicamente consistía en forzar la puerta de los transformadores y sustraer las pletinas de cobre, lo que hizo sospechar a los investigadores que pudieran haber sido cometidos por la misma persona.

Ante ello, se estableció un dispositivo discreto de vigilancia sobre los centros donde se sospechaba que pudieran estar siendo vendidas este tipo de pletinas de cobre y se procedió a la detención de un varón de 43 años cuando pretendía vender este tipo de efectos en una chatarrería de Córdoba capital.

En el momento de la detención se le intervinieron más de 100 kilos de cobre, que supuestamente había sido sustraído en once centros de transformación de electricidad ubicados en el Parque Tecnológico de Rabanales XXI, en la capital cordobesa.

Durante el desarrollo de la investigación, la Guardia Civil ha logrado vincular al ahora detenido con la comisión de 14 delitos de robo con fuerza en las cosas en 84 centros de transformación de energía eléctrica ubicados en las provincias de Córdoba, Jaén, Málaga, Sevilla y Albacete. Asimismo, se ha logrado recuperar más de 500 kilos de cobre que el detenido tenía preparado para su venta y más de 180 que ya había vendido en chatarrerías de la capital cordobesa. Se estima que el valor de los daños causados así como el de los efectos sustraídos supera el millón de euros.

La Guardia Civil ha recordado el peligro que entraña la manipulación de este tipo de pletinas de cobre en los centros de transformación de energía eléctrica, ya que pudiera producir la muerte por electrocución de las personas que las manipulen.