El BNG no envió a una representación de su formación al funeral oficial por las víctimas del accidente de tren de Angrois, que se celebró en la Catedral de Santiago el lunes, porque no comparte "ceremonias de sometimiento de lo público a lo religioso".

Son palabras del portavoz parlamentario del BNG, Francisco Jorquera, quien, preguntado sobre esta ausencia en rueda de prensa, ha defendido que en "un Estado aconfesional" como España hay que "establecer una separación estricta entre los poderes públicos y el ámbito religioso, que pertenece a lo privado".

En este sentido, ha dejado claro que el Bloque "está a favor de que se cumpla lo que establece la Constitución, con lo que a muchos se les llena la boca y luego la incumplen reiteradamente".

Así las cosas, ha puntualizado que la formación sí asistiría "a funerales privados, por respeto a las víctimas", pero no a ceremonias oficiales en templos religiosos. Al hilo de ello, ha juzgado que "si se respeta a las víctimas, hay que tener en cuenta que muchas eran creyentes, otras tenían otras creencias y otras no eran creyentes".

Actos "civiles"

Por ello, ha reivindicado la celebración de actos "de carácter estrictamente civil" y que "tengan en cuenta la pluralidad de sentimientos éticos y religiosos" de la sociedad, como el que se celebrará este miércoles en el parque de Bonaval para homenajear a las víctimas.

En la misma línea, el portavoz nacional de la formación frentista, Xavier Vence, ha mostrado su "respeto" a "todas las creencias, religiones y confesiones", pero ha reivindicado "igual respeto" para quienes "no tienen las mismas creencias o no profesan ninguna religión".