El rector de la parroquia barcelonesa de Sant Bernat Calbó de Poblenou, Francesc Romeu, que ha cobijado en su iglesia a medio centenar de inmigrantes subsaharianos desalojados de dos naves industriales, afirma que les ha acogido "por dignidad" y ha recordado que el Papa Francisco "está pidiendo gestos".

En declaraciones al portal religioso CatalunyaReligió.cat, Romeu, que es sacerdote, periodista y profesor en la Universidad Ramon Llull, ha asegurado que si el Papa viniese hoy a Barcelona vendría a su parroquia a ver a los inmigrantes, tal como lo ha hecho con las favelas en Río de Janeiro.

Varios centenares de inmigrantes, en su mayoría subsaharianos, fueron desalojados el pasado día 24 de dos naves industriales del barrio del Poblenou, por orden judicial, y un grupo se encerró en la parroquia de Sant Bernat Calbó para reclamar alojamiento para todos ellos, extremo que el Ayuntamiento de Barcelona ha asegurado que se ha llevado a cabo.

"O nos ponemos a hacer gestos como pide el papa Francisco, o nos equivocaremos", explica Romeu, que es rector de tres parroquias de este barrio y que ha recibido el apoyo y la felicitación por acoger a los inmigrantes del provincial de los franciscanos de Cataluña, Josep Gendrau.

"Lo hemos hecho porque nos toca", explica Francesc Romeu, que recuerda: "el Poblenou es el barrio donde tenemos las naves industriales ocupadas y no podemos ignorar esta realidad. Además, entre la población hay una conciencia muy extendida y clara que no son chusma, son vecinos del barrio".

"La comunidad ve que son personas vulnerables, que viven entre nosotros. Gente que trabaja en lo que puede, que quiere ganarse la vida, que son agradecidos cuando les das algo para que la vendan al trapero", agrega el sacerdote.

También reconoce que "hay un sector que no lo ve tan claro. Cuando los desalojaban también había gente que los insultaba. Pero entre la comunidad cristiana hay una sensibilidad muy clara".

El Ayuntamiento de Barcelona ha asegurado que este viernes empezará a realojar a los inmigrantes encerrados en la iglesia del barrio de Poblenou que así lo pidan en albergues o pensiones que tienen convenio con el consistorio.

Fuentes municipales han confirmado que ya han empezado a trabajar en la segunda tanda de realojos gracias a una lista que les ha facilitado la Xarxa de Suport als Assentaments, pero no el Ayuntamiento no quiere dar ninguna cifra hasta que no acabe el proceso para reubicar a estas personas. Desde la entidad que apoya a los subsaharianos, en cambio, hablan ya de unas 70 personas más las que tienen previsto pedir un techo al consistorio durante las próximas horas.

Los inmigrantes que el miércoles fueron desalojados de los asentamientos de las naves abandonados de Poblenou y que aceptaron la ayuda del Ayuntamiento podrán quedarse durante todo el mes de agosto en los alojamientos municipales.

Representantes de la Asamblea Solidaria contra los Desalojos se han reunido este jueves con el Ayuntamiento de Barcelona y han informado de que todos los inmigrantes que se acogieron al procedimiento de emergencia, tras el desalojo, pueden quedarse, como mínimo, todo el mes de agosto en los alojamientos que les ofreció el consistorio, una exigencia de los encerrados en una iglesia de Poblenou como protesta.

De ese proceso quedaron excluidos unos 25 inmigrantes que el miércoles no conectaron con los servicios sociales municipales y que  tienen previsto negociar con el consistorio su situación para tratar de encontrar una solución por la vía de emergencia u ordinaria.

Los inmigrantes también tiene previsto discutir la tarde de este jueves en asamblea si permanecen encerrados en la iglesia de San Bernat Calbó. Un total de 43 inmigrantes desalojados este jueves de una nave del Poblenou han pasado la noche en la iglesia, donde se encerraron tras el desalojo.

Los inmigrantes reclamaban un alojamiento al menos hasta el 31 de agosto y un trabajo, mientras que el Ayuntamiento les ofrece un alojamiento "transitorio paliativo" todo el mes de agosto para que entren en un "itinerario sociolaboral", pero teniendo en cuenta que "no pueden estar a beneficiencia hasta que se jubilen".

La noche ha sido muy tranquila y sin incidentes, según ha informado un portavoz de la Asociación solidaria contra los desalojos y de la Asociación de Vecinos del Poblenou, Manel Andreu, que ha anunciado asimismo que el ayuntamiento ha convocado a los representantes de los inmigrantes a una reunión para intentar desbloquear la situación.

Los Mossos d'Esquadra desalojaron este jueves por la mañana sin incidentes dos naves industriales de las calles Puigcerdà y Pere IV, ocupadas desde hace dos años por inmigrantes, que se encerraron en la iglesia del barrio, con la autorización del párroco, para forzar a las administraciones a agilizar los trámites burocráticos para regularizar su situación en España.

Manel Andreu ha remarcado el ambiente distendido que se vive en la iglesia y, sobre todo, la solidaridad de los vecinos, ya que muchos han facilitado a los inmigrantes encerrados comida y otros productos necesarios. Los encerrados, que tenían previsto mantener su protesta en la iglesia como máximo hasta finales de julio, pretenden que el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, "cumpla con su promesa" de no dejar a nadie en la calle y que las plataformas de apoyo a los inmigrantes puedan "verificar si hace lo que prometió".

Según la Asociación solidaria contra los desalojos, a fecha de este jueves el ayuntamiento había realojado a 15 personas, mientras que el consistorio barcelonés asegura que los inmigrantes a quienes se ha conseguido un nuevo alojamiento desde el pasado mes de enero se eleva a 137.