La fundación Asindown, ha denunciado que un pub localizado en la zona de Cánovas, en Valencia, vetó la entrada el pasado viernes a un grupo de siete jóvenes con síndrome de Down que se disponían a acceder al local con sus monitores.

El propietario del local afirmó que la negativa se debía a que el local estaba lleno, según publica hoy Las Provincias, pero los responsables de la asociación reclaman que el dueño aludió como motivo que eran "personas disminuidas".

Según informan desde la asociación, tres de ellos ya habían accedido al local, un pub en la calle Serrano Morales, cuando un responsable del mismo se les acercó para vetarles la entrada por ser menores de edad "aunque nadie nos había pedido el DNI".

Fue entonces cuando se les negó el acceso a los otros cuatro jóvenes y a los monitores y responsables de la fundación.

Según los denunciantes, les invitaron a marcharse a otro local, en el que se encontrarían más a gusto dado que "eran personas disminuidas" y se acogieron al derecho de admisión para negarles la entrada.

Desde el local, niegan que se trate de discriminación, "porque a personas en sillas de ruedas si les dejamos entrar".

Sin libro de reclamaciones

Tras el incidente, los monitores pidieron el libro de reclamaciones, pero se negaron a entregárselo "ya que no habíamos consumido".

Acto seguido llamaron a la Policía Local tras lo cual "accedieron a darnos la hoja de reclamación".

El encargado del local les acusó de "montar el numerito" en el momento en que "más trabajo tenía".

El dueño del bar insistió en que el motivo fue que el aforo estaba completo y aunque están "convencidos de haber hecho lo correcto", accedió a presentar las disculpas a Asindown "si alguien se sintió ofendido".