Andalucía ha votado en contra de los objetivos de estabilidad aprobados en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) y por el cual las comunidades autónomas tendrán que cerrar el año con un déficit del 1,3 por ciento y reducirlo al 1 por ciento en 2014.

El Gobierno y las comunidades han pactado estas cifras a pesar de los votos en contra de Canarias, Andalucía, Asturias y Cataluña y las abstenciones de Navarra y País Vasco. Cantabria no estaba presente en la votación.

De esta forma, las comunidades contarán con una décima extra de déficit este año tras el margen concedido por Bruselas, aunque mantienen los objetivos de 2014, 2015 y 2016. Así, las décimas adicionales que otorgó la Comisión a España para esos tres años quedarán reservadas para el Estado o la Seguridad Social.

En concreto, las comunidades contarán con un objetivo de déficit del 1,3 por ciento este año y un límite de endeudamiento del 19,1 por ciento. En 2014, el déficit tendrá que bajar al 1 por ciento y la deuda subirá al 20 por ciento. En 2015, el déficit deberá moderarse al 0,7 por ciento y la deuda subirá al 20,5 por ciento y en 2016 el déficit bajará al 0,2 por ciento y la deuda bajará al 20,3 por ciento.

La consejera andaluza de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, había criticado al inicio de la reunión el "reparto desequilibrado" de ese déficit entre Estado y comunidades autónomas, 5,2 y 1,3 por ciento, respectivamente, y que hace que la Administración General del Estado incluso crezca en el suyo mientras a las comunidades se les impone "todo el ajuste que se pretende este año".

"No nos parece razonable, menos aún cuando la Unión Europea ha dado dos puntos más de margen para España. Entendemos que este reparto no es coherente ni lógico", ha defendido la consejera subrayando que la horquilla que proponía la Junta nunca era menos de 1,7 por ciento y llega al 2,2 por ciento, como máximo.