El portavoz del Grupo Municipal del BNG en Santiago, Rubén Cela, ha pedido este jueves la dimisión del concejal socialista Bernardino Rama tras conocerse su imputación por los supuestos delitos de falsedad documental y prevaricación en el caso Montebalsa, de supuesto amaño de adjudicaciones, durante su época como responsable de Obras.

No obstante, en rueda de prensa, ha mostrado su "extrañeza" por que esta decisión judicial se produzca "pocos días" después de que la portavoz del PPdeG, Paula Prado, expresase su sorpresa por que no estuviese vinculado con ningún caso. Esta "extrañeza" se ha visto acentuada, según sus propias palabras, al tratarse de la "reapertura" del caso Montebalsa, que entendía "cerrado" tras su paralización en 2009.

"No establezco una relación, pero me causa sorpresa y extrañeza ver que se reabre un caso que yo pensaba que estaba cerrado a los pocos días de que, ni más ni menos que la portavoz del PP en toda Galicia, haga esas declaraciones", ha resuelto, tras ser preguntado al respecto por los periodistas.

Al margen de ello, el líder nacionalista en el Consistorio compostelano ha reclamado a Bernardino Rama que renuncie a su acta municipal "por higiene democrática", dado el "perjuicio" que supone "para la imagen de la ciudad" una nueva imputación y porque, como ha señalado, este caso hace aumentar la "desafección" de los vecinos hacia sus "instituciones y representantes" públicos.

"no tenemos dos varas de medir"

"Nosotros no tenemos dos varas de medir, el BNG mantiene una posición única respecto a este tipo de situaciones", ha subrayado. En este punto, ha puntualizado que "un concejal imputado porque lo denuncia un vecino por una expropiación para hacer una rotonda, posiblemente no tenga que dimitir", pero sí en aquellos casos relacionados con "corrupción".

Más aun, como ha subrayado Rubén Cela, en el actual "contexto social", en el que es conveniente, a su entender, enviar "el mensaje de que, a quien imputan en casos relacionados con la corrupción, se aparta de la gestión pública". "Es lo más sensato", ha interpretado, convencido de que "no" obrar de este modo conllevaría un incremento de la "desafección" hacia la política.

Así las cosas, ha desechado esperar para conocer si el juez José Antonio Vázquez Taín, instructor del caso Montebalsa, mantiene la imputación a Bernardino Rama tras escuchar su declaración. "Estamos en un momento social especialmente sensible y el mensaje más positivo que podemos trasladar es que, ante la duda, los imputados abandonen sus cargos", ha zanjado.

A renglón seguido, ha explicado que la "postura genérica" de la formación frentista a respecto de las imputaciones de los cargos públicos establece "una nítida separación" entre las responsabilidades jurídicas y las políticas. Así, por un lado está "la presunción de inocencia" y el derecho a defenderse y, al margen, "la responsabilidad política" de la imputación, que tiene "consecuencias prácticas" en las instituciones.

Preguntado si ha hablado del tema con su excompañero de Gobierno, ha explicitado que no tuvo tiempo antes de la comparecencia ante los medios, pero ha avanzado que lo hará. Así, acerca de si no conocía que el Bloque pediría su dimisión, ha dado por hecho que "no le cogerá por sorpresa", porque ya conoce su actuación en estos casos.

Que comience el pp

Dicho esto, Rubén Cela ha enfatizado que las dimisiones en el Ayuntamiento de Santiago deberían "comenzar" por parte de los ediles del PP "imputados en causas que han causado graves perjuicios a la ciudad".

En este sentido, ha recordado que de los "seis concejales" y "tres altos cargos de libre designación" del PP que han sido vinculado con distintos casos judiciales desde su llegada al Consistorio hace dos años, únicamente "dos" han presentado su dimisión.

Iu también pide su dimisión

A mayores, a través de un comunicado de prensa, el Consello Comarcal de IU en Santiago ha pedido la dimisión de Bernardino Rama porque "la responsabilidad política que deben impregnar a todo cargo público" así lo exige.

"Desde el respeto a su presunción de inocencia", Esquerda Unida ha juzgado "intolerable que la sospecha permanente" se instale en el Ayuntamiento de la capital gallega mientras la ciudadanía está "ahogada por los recortes y las políticas austericidas".

Finalmente, ha reclamado "una vez más" la dimisión de todos los implicados en distintos casos, toda vez que "el escándalo continuado lesiona, no sólo la imagen de este Consistorio, sino la misma democracia".

Por todo, Esquerda Unida ha vuelto a pedir que se disuelva el Ayuntamiento y que se celebren unas nuevas elecciones municipales que permitan "regenerar una corporación herida de muerte".