La Policía Foral ha atendido durante este domingo numerosas incidencias como consecuencia del temporal de lluvia que ha provocado desbordamientos en la Cuenca de Pamplona y numerosas incidencias en las carreteras de la mitad norte de la Comunidad foral.

En concreto, a primeras horas de la mañana, los agentes han atendido desprendimientos en la NA-2517 (curva de Arre) y en la NA-7171, a partir del punto kilométrico 2,5, así como balsas de agua en la N-121-A, a la altura de Olave, y en la NA-700, en Ororbia.

Además, como consecuencia de las intensas lluvias, se ha inundado la sala de calderas de las piscinas de Villava, el hotel Irigoienea, en Urdax, y el cuartel de la Guardia Civil de Bera. También se ha cegado el sumidero de Azoz, en Ezcabarte, donde se alerta de que el agua pueda entrar a las casas.

Asimismo, a partir de las 8.00 horas de este domingo, la Policía Foral ha atendido distintas incidencias por balsas de agua en las carreteras PA-30, NA-6016 (Uterga); NA-1110, en Astrain; y en la carretera entre Mendigorría y Puente la Reina.

Por otro lado, el Arga se ha desbordado en el puente de San Andrés de Villava; y en la N-135, carretera de Pamplona a Francia por Valcarlos. Además, el río Arakil se ha desbordado en la NA-2410, en la carretera de Uharte Arakil; y el río Ulzama ha provocado inundaciones en la entrada a Ciaurriz y en la NA-411, a partir del pk 26,5.

También se han producido desprendimientos como consecuencias de las lluvias en la NA-7010 (Atondo); en la N-135, a partir del pk 10; en la vía verde en Santesteban y en la NA-120 pk 28 (Lizarraga). La Policía Foral ha atendido además a una mujer atrapada por el agua en una huerta de Arre, que ha sido rescatada por los bomberos.

Durante la noche no se han registrado accidentes en las carreteras como consecuencia de la adversa climatología, y a primeras horas de la mañana un vehículo se ha salido de la calzada en la Autovía del Pirineo (A-21) en Yesa, resultando herido leve uno de sus ocupantes.

El Gobierno de Navarra recomienda a los conductores que extremen la precaución debido a la existencia de tramos de carretera inundados o con balsas a causa de las intensas lluvias que se registran en la mitad norte de la Comunidad foral.