El Premio Nobel de Física en 1986 y miembro de la Academia Europea de Yuste, Heinrich Rohrer, ha fallecido. Rohrer ocupaba el sillón 'Cristóbal Colón', reconocimiento que recibió de manos de la Casa Real en junio de 1998.

El coinventor del microscopio de efecto túnel y promotor de la ciencia que estudia la nanotecnología, estuvo en Yuste en varias ocasiones, siendo una de ellas con motivo de la entrega del 'Premio Europeo Carlos V' a Wilfried Martens, acto que coincidió con su reconocimiento como académico, según ha informado la Fundación Academia Europea de Yuste en nota de prensa.

Posteriormente, asistió a la reunión de la Academia Europea de Yuste celebrada el 3 de junio de 2002 donde tomó parte en la firma de la declaración de Yuste 'Europa una cultura para la solidaridad'.

La última vez que estuvo en Yuste fue en la reunión de la Academia celebrada en octubre de 2004 para aprobar la declaración 'Europa ante el envejecimiento demográfico'.

El premio Nobel siguió colaborando con la Fundación, y de este modo, en el año 2009 impartió la conferencia de clausura 'Nanotecnología, como clave para la sostenibilidad' en el marco de un curso que abordaba cuestiones relacionadas con la energía en el espacio Eurolatinoamericano organizado por la Universidad de Extremadura y la Fundación Academia Europea de Yuste en el año 2009.

Desde su nombramiento, Heinrich Rohrer mantuvo un contacto "directo y continuo" con la Fundación Academia Europea de Yuste y participó "muy activamente" tanto en sus debates intelectuales dirigidos a afrontar de manera "óptima y reflexionada" los desafíos a los que se enfrenta la Unión Europea, como al "papel crucial que desde la Fundación y la Academia se podría jugar en el contexto europeo".

"Son dignos de recordar los interesantes debates y discusiones con sus compañeros de academia sobre temas diversos de actualidad europea que, no formando parte de sus competencias profesionales de manera directa, para nada le eran ajenos", ha remarcado la fundación.

Además, ha apuntado que Heinrich Rohrer era un "europeísta convencido, defensor del trabajo en red, abierto a nuevas ideas, y riguroso en sus opiniones, que en el marco de la Academia Europea de Yuste enlazaban a la perfección ciencia y humanismo".