Si bien es cierto que ahora muchos inmigrantes optan por regresar a su país de origen ante la dificultad de encontrar un empleo aquí, en la última década han llegado un millón de extranjeros a Catalunya. Con ellos, también se han multiplicado los lugares de culto, sobre todo de religiones minoritarias en España, como el budismo o el hinduismo.

Desde el departamento de Afers Religiosos de la Generalitat recuerdan a 20 minutos que es imposible saber cuántos fieles hay. El católico, por ejemplo, es aquel que asiste a misa los domingos y en determinadas fiestas, pero también lo es el que no va nunca a la iglesia pero que se considera católico. Es por ello que se toma como referencia el número de lugares de culto de cada religión.

Según el Institut d'Estadística de Catalunya, en 2004 había ocho iglesias ortodoxas, mientras que en 2010 (los últimos datos disponibles), había 30, un 275% más. También han registrado un incremento espectacular, del 180%, los centros sijs, al pasar de 5 a 9. Los centros hinduistas han crecido un 112,5%, al pasar de 16 a 30, y los budistas, un 96,4%, al pasar de 42 a 55 centros.

Los únicos que tienen menos lugares de culto que antes son los testigos de Jehová, que se han reducido un 10,9%, al pasar de 147 a 131. La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, el taoísmo y el judaísmo cuentan con los mismo centros que en 2004: son 14, 6 y 4, respectivamente.

En términos absolutos son los centros evangélicos y los islámicos los que más han crecido los últimos años. En Catalunya, hay 600 iglesias evangélicas, un 75,9% más que en el año 2004, cuando había 341, y 195 mezquitas y oratorios islámicos, frente a los 169 de hace nueve años, lo que supone un incremento del 44,4%.

En cualquier caso, la mayoría de lugares de culto son católicos, pues hay 6.729. El dato no se puede comparar porque no se incluyó en recuentos anteriores, pero desde Afers Religiosos aseguran que prácticamente no se han cerrado parroquias ni conventos pese a que «la secularización en Europa Occidental es más evidente que en otros países».