El vicepresidente y consejero de Economía y Hacienda, Juan Bernal, ha avanzado este miércoles que la aprobación política del plan de ajuste, es decir "dar el visto bueno al paquete de medidas que se quieren implantar, es inminente", de forma que será a partir de ese momento cuando "se inicie el diálogo con los agentes sociales".

Tras dejar claro que el Gobierno "debe ir abierto al diálogo, siendo capaz de adaptarse a algunas de las demandas y reflexiones que transmitan los agentes sociales", Bernal ha insistido que "el plan estará aprobado cuando, partiendo de su aprobación política, se produzca ese diálogo social y se llegue a su aprobación final".

"Entre tanto, esperamos que se resuelva el tema del objetivo de déficit", ha puntualizado el vicepresidente murciano, quien ha recordado que "como máximo el Gobierno de la nación tendrá que comunicar el objetivo de déficit el 29 de mayo y esperamos que la fijación de dicho objetivo se produzca antes".

Debido a que aún se desconoce cuál será el objetivo de déficit de la Región para este año, "lo que condiciona mucho cuál será el paquete final de las medidas", ha señalado que "habrá que esperar a que esto se resuelva, además de que todo proceso requiere debate".

En su opinión, "todo plan tiene un proceso de maduración, de discusión y de debate". En este sentido, Bernal también se ha referido a las financiación que determinadas comunidades "han tenido muy por debajo de las demás y si en este momento el Estado tiene en cuenta que hay determinadas CCAA que tienen una situación muy especial y requieren de un tratamiento individualizado, esto no debe de ofender a nadie y no tiene sentido que hagamos unas declaraciones de unas comunidades contra otras".

Bernal ha expresado su intención de "reducir el déficit y los pagos se produzcan con plena normalidad, cumpliendo la ley de morosidad, que indica que en un plazo de 30 días tendríamos que pagar".

Sobre el nuevo plan de pagos, Bernal ha adelantado que parece ser que el colectivo objetivo serán "los ayuntamientos, las facturas del pasado año y ver si pudieran también estar las universidades públicas".

Y es que, ha señalado, "si atendemos todas las facturas pendientes de 2012, la situación financiera mejorará de forma enorme y quitaremos varias tensiones de tesorería que, en estos momentos, nos está produciendo molestias".