Anova ha considerado que la entrada de Pemex con mayoría en el accionariado del astillero vigués Barreras es "hambre para mañana" además de una "mala noticia para la poca empresa gallega que aún queda", por lo que ha denunciado que, con este movimiento, "continúa el expolio".

En un comunicado titulado "Venta de Barreras: ¿pan para hoy?... hambre para mañana ¡seguro!", la formación nacionalista se ha mostrado crítica con la decisión sobre el astillero gallego y alerta de "la política nefasta de venta del aparato productivo gallego dejando a las empresas al albur de decisiones accionariales ajenas al país".

Además, en este caso considera que se realiza "a cambio de una más que dudosa carga de trabajo temporal" pues, según mantiene, Pemex tiene intención de "chupar y transferir tecnología gallega a los astilleros mexicanos" a cambio de "solo 10 millones de euros" y contando con el control del 51 por ciento de Barreras.

Así, considera que la operación "será buena para la empresa pública mexicana" pero "una nueva mala noticia para la poca empresa gallega que aún queda". Por ello, denuncia que "continúa el expolio" y, tras aludir a los casos de "Fenosa, Banco Pastor y ahora Barreras", se pregunta si "facilitar esa sangría" es "la solución del gobierno Feijóo para la economía gallega".