La Policía Foral ha detenido a dos hombres como presuntos autores de un delito de robo continuado con fuerza en las cosas y daños agravados al desvalijar durante semanas un edificio de oficinas sin uso situado en la urbanización de Nuevo Artica (Berrioplano).

Los arrestados son J.C.J, de 31 años y vecino de Pamplona, y A.S.S., de 31 años y vecino de Logroño, ambos con antecedentes relacionados, según ha informado el Gobierno navarro a través de un comunicado.

El titular del juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona, que instruye las diligencias de este caso, ha decretado el ingreso en prisión de J.C.J. Por su parte A.S.S. ha sido puesto en libertad tras depositar la fianza impuesta por el juez.

En una primera estimación, la empresa propietaria del edificio, cuya construcción terminó en 2009 y que actualmente se encuentra vacío, ha cuantificado en 200.000 euros el valor de los objetos robados y dañados. No obstante, según afirma la empresa, es posible que esta cuantía se duplique cuando se realice una valoración más exhaustiva.

El inmueble tiene 6.000 metros cuadrados divididos en cuatro plantas (sótano, baja, primera y segunda) y, presuntamente, los detenidos han sustraído de él puertas, armarios, falsos techos, grifos, extintores, cableado, pasamanos de escaleras, tubos de cobre del aire acondicionado y equipos de climatización, entre otros materiales.

El pasado 21 de abril la Policía Foral recibió el aviso de un ciudadano que informaba de la presencia de dos vehículos en las inmediaciones de un edificio de oficinas situado en Artica (Berrioplano) y que podían estar implicados en un robo de cobre.

Una vez en el lugar, los agentes observaron cómo llegaba hasta allí un camión caja del que descendían dos varones. Estos entraron en el edificio para sustraer diverso material, lo cargaron en el camión y se fueron.

Tras interceptar el vehículo, los agentes detuvieron a los dos varones y comprobaron que transportaban tubos de cobre de aire acondicionado, sirga de cobre y diferente cableado.

Posteriormente, la Policía Foral comprobó que parte del material sustraído se encontraba en una chatarrería y en otra empresa. Concretamente eran dos rollos de tubo doble para aire acondicionado, seis compresores, seis recipientes frigoríficos y dos radiadores.