El único centro de producción en el extranjero del grupo alemán Bada AG, la fábrica oscense Bada Hispanaplast, es el primer fabricante de plásticos técnicos en España que ha obtenido la certificación ISO/TS 16949:2002, específica para proveedores del sector de automoción.

Según ha informado la compañía en una nota de prensa, esto permite a la planta diferenciarse del resto de las empresas del sector de plásticos técnicos en España, por el control y exigencia de calidad que implica, tanto en los procesos de producción como en el producto final.

Además, esta certificación permite a la fábrica oscense mantener la línea de actuación de la matriz alemana, que ya cuenta con esta certificación ISO/TS16949 desde 2004, y adelantarse a las exigencias del sector de la automoción.

Bada Hispanaplast, dedicada a la producción y comercialización de termoplásticos, está situada en la Ronda Industria del Polígono Sepes de Huesca. Sus productos se suministran a las principales marcas de fabricantes de distintos tipos de piezas, para los sectores de automoción, electrodomésticos, electrónica, deporte, ocio, construcción, menaje y mobiliario de la industria mundial.

PLÁSTICOS

Los plásticos fabricados por Bada son utilizados por sus clientes para la producción de enchufes, conexiones eléctricas, menaje del hogar, rodamientos, ruedas de sillas, fijaciones de esquís, carros de supermercado o piezas para coches.

Desde Huesca, Bada produce la misma gama que su matriz alemana y la distribuye en el suroeste de Europa, América Latina y otros países como China o India.

La planta oscense fue inaugurada en el 2007, tras una inversión de 4 millones de euros, y desde su inicio ha vivido un crecimiento constante tanto en producción, que alcanza 9.000 toneladas anuales, como en número de trabajadores, 45 en la actualidad. Las instalaciones cuentan con 4.300 metros cuadrados, con un laboratorio y un área de producción.

Por otra parte, la fábrica ha sido seleccionada para aportar su experiencia empresarial, junto a 200 empresas de toda España, en la segunda parte del libro 'El crac del 2008. La crisis que cambió el mundo', de la colección 'Testimonios para la historia'.