El bebé de dos meses que ingresó el pasado 12 de abril en la UCI pediátrica del Hospital La Fe de Valencia en estado muy grave y con síntomas que respondían a posibles malos tratos, ya que presentaba hematomas cerebrales propios del síndrome del niño zarandeado y fractura craneal, continúa hospitalizado con pronóstico reservado, según han confirmado este sábado fuentes de este centro hospitalario.

Según informó la Jefatura Superior de Policía, el menor se encontraba en estado muy grave y presentaba hematomas cerebrales y fractura lineal craneal.

La Policía abrió una investigación por estos hechos y averiguó que no se trataba de un traumatismo accidental y que la persona que se encontraba con el bebé en el momento en el que podría haber sufrido los malos tratos era su padre, por lo que el pasado lunes procedió a la detención de este hombre, de 20 años y nacionalidad nigeriana, como presunto autor de malos tratos y lesiones graves.

El detenido, con antecedentes policiales, pasó este miércoles a disposición judicial y tras su comparecencia, de acuerdo con la petición de Fiscalía, la juez de instrucción 15 de Valencia decretó orden de alejamiento del padre para garantizar la protección del pequeño. Además, la juez acordó la obligación de comparecencia periódica ante el juzgado y se practicarán nuevas diligencias.

Por otro lado, la niña de dos años que se cayó ese mismo viernes día 12 desde un noveno piso en un edificio de Valencia también continúa ingresada en el Hospital Universitari La Fe de Valencia con pronóstico reservado, han indicado las mismas fuentes.

El incidente tuvo lugar pasadas las 20.30 horas en la calle Ángel Villena de Valencia, cuando la menor se cayó desde un noveno piso, por circunstancias que la Policía está investigando, y fue ingresada en estado muy grave, con politraumatismos, en la UCI Pediátrica.

La Policía detuvo a la cuidadora que se encontraba con ella en el momento de los hechos por un presunto delito de abandono.

A su vez, también continúa ingresada en La Fe en estado grave la mujer que se quemó a lo bonzo en febrero tras rociarse con un líquido inflamable y prenderse fuego en una entidad bancaria de la localidad castellonense de Almassora, en la avenida José Ortiz.

La mujer, que fue estabilizada por una unidad del SAMU en el lugar y trasladada al hospital en un helicóptero medicalizado tras el suceso, sufrió quemaduras en el 48 por ciento del cuerpo.

El herido de bala en silla sigue grave

Igualmente, permanece hospitalizado en La Fe, también en estado grave, el hombre de 43 años que resultó herido de bala en cara, tórax y muslo durante un tiroteo registrado este miércoles por la noche en las proximidades de la localidad valenciana de Silla

La Guardia Civil abrió una investigación al respecto y está recabando datos, pero por el momento no consta que haya detenidos.