Por quinto año consecutivo, el Obispado de Canarias ha despedido a una profesora religión católica.
El motivo: haber participado en una huelga legal en 1999 -según informa El País-.
Los prelados se amparan en el sistema, que les permite seleccionar cada curso a los docentes y prescindir de ellos a su antojo -aunque es el Estado quien paga-.
No obstante, el Tribunal Superior de Justicia canario le ha pegado a los obispos cinco tirones de oreja en forma de cuestiones de inconstitucionalidad, argumentando que "vulneran los derechos fundamentales".
Vida destrozada
El calvario de Nereida del Pino comenzó en 1999, cuando participó en un encierro de los profesores de religión en protesta por sus condiciones laborales.
A partir de ese momento -y según fuentes judiciales mentadas por El País-, la docente ya no fue propuesta para el curso siguiente.
"Estas situaciones destrozan la vida, así que me he buscado otro trabajo (...), no puedes estar esperando curso tras curso a que hagan lo que mandan los jueces", afirma Del Pino -en declaraciones recogidas por El País-.
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