Agentes de la Policía Nacional han desarticulado en Badajoz un grupo organizado, formado por diez personas, que se dedicaban a la estafa mediante el "timo de la estampita", y al que se le imputan 31 delitos de este tipo.

La banda, compuesta por un clan familiar, operaba en Sevilla y ha timado más de 116.000 euros en efectivo y casi 100 joyas de oro a sus víctimas.

Según relata la Policía Nacional en nota de prensa, la investigación comenzó a mediados de 2011 cuando los agentes tuvieron conocimiento de la comisión de tres timos de la estampita "en un corto periodo de tiempo" y con un 'modus operandi'.

En concreto, en este tradicional timo, la víctima es abordada por un estafador con supuestas escasas facultades mentales que lleva consigo un sobre lleno de billetes, a los que no da ninguna importancia, tratándolos como estampitas.

Después un segundo timador convence a la víctima seleccionada para engañarla ofreciéndole una cantidad de dinero por sus estampitas, y al entregar el dinero, la víctima recibe un sobre con recortes de papel, envueltos en uno o varios billetes de curso legal en los extremos.

Al percatarse de este hecho el perjudicado, los estafadores ya han huido del lugar, relata la policía.

Desarrollo de la investigación

Explica la policia que las primeras pesquisas identificaron un varón de raza blanca de unos 60 años, cuya descripción había sido aportada por casi todas las víctimas, y a partir de él, los agentes localizaron a un grupo formado por un clan familiar que residía en Badajoz y operaba fuera de la provincia.

Sus miembros "habían hecho de este timo su forma de vida", que iban perpetuando de generación en generación mediante la integración de los familiares mayores de edad.

Explica la Policía que este clan "vivía única y exclusivamente de la comisión de estos actos delictivos", ya que las cantidades de dinero estafadas eran muy elevadas, e incluso "llegaban a solicitar a las víctimas la entrega de joyas de oro cuando consideraban que la cantidad aportada no era suficiente".

La operación ha sido realizada por agentes adscritos a la Jefatura Superior de Badajoz, en colaboración con los agentes de la Comisaría de Distrito de Macarena en Sevilla.