El grupo parlamentario de EH Bildu ha denunciado este lunes la "intromisión intolerable" que supone el hecho de que la embajada turca haya solicitado a la presidenta de la Cámara vasca, Bakartxo Tejería, que impida el debate propuesto por la coalición sobre la situación de Kurdistán. "El Gobierno turco no es nadie para decirle a este Parlamento sobre qué puede o no puede debatir", ha defendido.

En un comunicado, EH Bildu ha informado de que la embajadora de Turquía en el Estado se ha dirigido, a través de un fax, a la presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejería, para solicitarle que impida la aprobación de una proposición no de ley de EH Bildu sobre la situación que se vive en Kurdistán.

El parlamentario de EH Bildu Igor López de Munain registró la iniciativa el pasado 31 de enero para denunciar el asesinato de tres militantes del movimiento nacional kurdo refugiadas en París.

Según ha informado la coalición, la embajadora turca considera "inaceptable" dicha proposición no de ley y pide a Tejería que ponga "todo su empeño" para impedir que sea aprobada porque considera que "es un intento de ensombrecer las relaciones entre España y Turquía".

Tras conocer la carta de la embajadora, EH Bildu ha denunciado esta forma de actual al considerar que "vulnera la autonomía que es propia de todo parlamento, también del Parlamento Vasco".

"intromisión intolerable"

En esta línea, la coalición ha criticado esta "intromisión intolerable" e insta a Tejería a "dar una respuesta a la medida de esa intromisión" porque "es a ella a la que corresponde defender la autonomía de la Cámara".

"Tiene que dejarle claro a la embajadora turca que su gobierno no es nadie para decirle a este Parlamento sobre qué puede o no puede debatir", ha insistido.

A juicio de EH Bildu, la reacción de la embajadora "evidencia la oportunidad de la proposición no de ley, tanto para condenar el asesinato de las tres refugiadas kurdas como para reivindicar una solución dialogada y negociada al conflicto de Kurdistan".

"La embajadora demuestra que las presiones, las amenazas sucintas y las actitudes antidemocráticas caracterizan la política del Gobierno de Turquía en relación con Kurdistán y con quienes se solidarizan con el pueblo kurdo", ha concluido.