El Auditorio Ciudad de León acogerá mañana viernes 22 de febrero (a las 21.00 horas) la obra teatral con temática policíaca 'Naturaleza muerta en una cuneta', de Fausto Paravidino, que dirige y protagoniza Adolfo Fernández.

La trama de esta obra gira en torno al asesinato de una joven hallada sin vida en la cuneta de una carretera y la "trepidante" carrera contra reloj del inspector encargado de la investigación que dispone solamente de 16 horas para resolver el caso, antes de que el crimen trascienda y Elisa Orlando se convierta en una muerta de telenoticias.

Para ello, seis actores encarnarán cerca de treinta personajes, si bien hay seis de ellos fundamentales para el autor que serán los ejes por los que transcurra la acción que, a pesar de tener una clave policíaca heredera del cine negro, es por momentos "hilarante", según un comunicado de prensa municipal recogido por Europa Press.

El texto, sin embargo, más allá del tópico policíaco, quiere exponer y constatar una realidad social.

Un aspecto en el que el autor denuncia esos asesinatos mediáticos como parte, única y exclusivamente, del lado "oscuro" de la sociedad, "realidades crudas y sangrantes que no han de mezclarse con la pulcritud de la clase media que sostiene el sistema".

En la obra, los padres de la víctima, licenciados, nunca sospecharían que su dúctil hija mantuviera una vida diferente al traspasar el umbral del hogar, mezclándose con la realidad más incómoda, marginal y delictiva de la sociedad.

'Naturaleza muerta en una cuneta' es un ejemplo de crónica negra, un caso de asesinato narrado en forma de confesiones policiales que parecen nunca acabar.

Dirigida por Adolfo Fernández, el elenco de la obra está formado por Susana Abaitua (Daifa), Sonia Almarcha (madre), David Castillo (Ángel), Juan Codina (novio), Adolfo Fernández (inspector Salti) e Ismael Martínez (camello 'La ruina').

PARAVIDINO

El público italiano eligió en 2004 a 'Naturaleza muerta en una cuneta' como el mejor texto del año y se le otorgó el Premio Gassman. Fausto Paravidino es un autor del siglo XXI, descubierto en el año 2000, a los 23 años.

Desde entonces, ha sido seleccionado por varias comisiones de teatro joven en el National Theatre y el Royal Court de Londres y su fama ha estado presente en teatros de Francia, Alemania e Inglaterra.

El ritmo de sus diálogos, "directos y rápidos, como si fueran cinematográficos", ha conquistado a la juventud europea. En sus obras trata géneros de diverso tipo, aunque se centra siempre en los problemas juveniles de sus coetáneos.