Agentes de la Policía Nacional han detenido a 31 personas en Valencia, Castellón, Barcelona, Lérida y Gijón que falsificaban documentos para poder percibir prestaciones por desempleo. Según informa en un comunicado la Policía Nacional, entre los arrestados se encuentra el administrador único de una empresa, que carecía de actividad real, y que presuntamente firmó contratos fraudulentos generando una deuda con la Hacienda Pública superior a los 104.000 euros en un año.

La mercantil habría inscrito en la Seguridad Social a 54 trabajadores extranjeros para obtener autorizaciones para residir y trabajar en España. Además de falsificación documental, a algunos de los detenidos se les imputa también un delito de estafa.

La investigación se inició a raíz de un informe elaborado por el Consorcio de Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Cataluña, en el que se notificaba la existencia de una empresa ficticia que, de manera fraudulenta, habría dado de alta a 54 trabajadores extranjeros sin existir ninguna actividad laboral.

Las primeras pesquisas realizadas por los agentes confirmaron que la mercantil efectivamente no tenía actividad real y que no existía ninguna persona trabajando para la misma.

La mayoría de los contratados fraudulentamente eran extranjeros porque la pretensión de éstos era incorporar los contratos a un procedimiento administrativo y conseguir así la autorización de residencia y trabajo en España, regularizando, de este modo, su situación en nuestro país.

También, llevaban a cabo solicitudes para obtener prestaciones o subsidios por desempleo. Los falsificadores a los pocos días de la concesión de la autorización se desvinculaban de la empresa. Todos los arrestados conocían que la sociedad carecía de actividad laboral y que no iban a desempeñar ningún puesto de trabajo en la misma.