La Policía Nacional desalojó durante la tarde de este lunes a una veintena de personas que se habían encerrado en la sede de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS) de Madrid para evitar sus desahucios y detuvo a dos de ellas por resistencia y desobediencia a la autoridad.

El desalojo tuvo lugar sobre las 18.00 horas. Dos de los encerrados fueron llevados a la comisaría de Moratalaz por resistirse a los agentes. Otros once fueron trasladados a la Comisaría de Arganzuela para su identificación, ya que se negaron a facilitar su DNI. Nueve personas más mostraron sus documentos de identidad, por lo que abandonaron el lugar después de que los agentes les tomasen los datos.

La acción de protesta fue protagonizada por miembros de cuatro familias afectadas por desahucios y por representantes de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH).

Tatiana Roeva, representante de la PAH, explicó que los afectados habían acudido a la EMVS para devolver parte de la deuda que tienen pendiente, pero se han encontrado con "la negativa de diálogo por parte de la empresa", por lo que decidieron protagonizar un encierro.

Según Roeva, el desahucio de dos de las familias ha sido emplazado para el mes que viene —siendo estas segundas fechas, mientras que a las otras dos se les ha notificado por primera vez—, "sin dar soluciones alternativas" ni contemplar la renovación del contrato que solicitan los afectados.

"El Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo, en una decisión reciente ya actuaba contra el Instituto de la Vivienda de Madrid por proceder de esta forma, paralizando un desahucio de una mujer por motivos humanitarios", alertó la Plataforma.

"Ni la legalidad europea ni los Derechos Humanos parecen importar a los responsables de la EMVS. Ante esto, tomamos la decisión firme de continuar encerrados en su sede hasta que entiendan que no toleramos ni un desahucio más", concluyó.