La asamblea de la Federación Española de Atletismo aprobó un presupuesto para 2013 de 7.963.967 euros, lo que supone un recorte de un 24,94 % con respecto al del ejercicio anterior y la mitad que en el año olímpico de 2008.

El proyecto contempla una subvención de 2.912.788 procedente del Consejo Superior de Deportes, un 34,45 inferior a la del ejercicio precedente, y otra de 421.500 euros del plan ADO, un 63 % menos que en 2012. El capítulo de ingresos propios asciende a 3.584.214 (un 11,54 menos). "Hemos tenido conversaciones con el CSD pero no se comprometen a nada. Ni siquiera se ha publicado la convocatoria de subvenciones. Tenemos que presentar un presupuesto estimativo, y cuando se sepa la subvención, en abril, mayo, o cuando sea, la Comisión Delegada tendrá que hacer los correspondientes ajustes", explicó el presidente, José María Odriozola.

Al apartado de becas para atletas, según el proyecto, se destinará un millón de euros, un 35,48 % menos que en 2012. El presupuesto fue aprobado por abrumadora mayoría: 99 votos a favor, 7 en contra y 6 abstenciones.La liquidación del ejercicios de 2011, que arroja una pérdida de 232.944 euros, fue aprobada con 103 votos a favor y 10 abstenciones, y la del 2012, con un déficit de 242.342 euros, con 104 a favor y 9 abstenciones.

La asamblea ratificó, con 100 votos a favor, 3 en contra y 10 abstenciones, que el presidente cobre un sueldo de la Federación, que para 2013 será de 56.898 euros, es decir, 16.146 menos que el año anterior, lo que supone una reducción del 22,11 por ciento. "Creo que hay problemas mucho más graves en el atletismo español que el sueldo del presidente", afirmó Odriozola. "Soy un presidente ejecutivo, no honorario, y no he engañado a nadie. En mi programa se recogía mi sueldo y nadie, en todos estos años, me puede acusar de fraude".

Jesús Ángel García Bragado admitió que el presidente debe cobrar un sueldo, pero opinó que "debería reducirse en la misma proporción que los recortes de las becas, en la proporción de los ingresos reales".

Vicente Añó, candidato derrotado en las elecciones a la presidencia del 16 de diciembre pasado, había propuesto que Odriozola cobrase la pensión de jubilación a la que tiene derecho como catedrático de la Universidad Complutense y solo percibiera gastos de representación por su trabajo federativo "en la misma cuantía que en 2012 menos la media del porcentaje que bajen el resto de las partidas presupuestarias".