El delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo, ha remitido un oficio al Fiscal Jefe de la Audiencia Nacional en el que pone en su conocimiento, "por si pudiera ser constitutivo de delito", la moción aprobada por el pleno del Ayuntamiento de Sopelana (Bizkaia), en la que se pide que se decrete la libertad condicional para 13 presos de ETA con enfermedades graves o incurables.

En su escrito, Carlos Urquijo hace referencia a que el citado acuerdo, que contó con los votos a favor de Bildu, la abstención del PNV y fue rechazada por PSE y PP, "también podría contravenir lo previsto en las Leyes de Reconocimiento, Protección y Reparación a las Víctimas del Terrorismo".

En la moción, aprobada este pasado lunes, se pide que se decrete la libertad condicional para 13 presos de ETA con "enfermedades graves o incurables". La iniciativa, presentada por Bildu, recuerda que, durante los últimos años, "hemos tenido sobre la mesa la situación irreversible del estado de salud de muchos presos" y, en la actualidad, todavía hay reclusos "gravemente enfermos que siguen en prisión".

"Esta situación está agravando su estado físico y aumentando la inquietud de sus familiares. Se les están negando los derechos que tienen como personas y como presos", lamenta la moción, que afirma que el tratamiento y seguimiento de las enfermedades que sufren estos trece reclusos es "incompatible con su mantenimiento en prisión".

De este modo, destaca que estas enfermedades requieren "un cuidado riguroso" y añade que, en la cárcel, no es posible ofrecer tratamiento especializado y no existe capacidad de "dar una respuesta ante una posible urgencia".

En este sentido, apunta que, con motivo del caso del preso de ETA Josu Uribetxeberria, enfermo de cáncer, "se han reafirmado ante el Ministerio del Interior todos estos argumentos". Tras la puesta en libertad condicional de Uribetxeberria y "atendiendo a los mismos argumentos", plantea que hay que "excarcelar a los otros trece presos que padecen enfermedades graves e incurables" y que están sufriendo "un castigo añadido".

"Negando la libertad condicional a estos presos, los responsables políticos de Madrid están quebrantando los pilares básicos de los derechos humanos. Las normas, principios jurídicos y reivindicaciones a favor de los derechos humanos tanto internacionales como del estado español declaran la necesidad de respetar los derechos de las personas presas que tienen enfermedades graves e incurables", insiste.

En este contexto, la moción insta al Gobierno central a dar "pasos reales" en el cumplimiento de la ley vigente "de acuerdo con la voluntad de la mayoría de este pueblo".

El Ayuntamiento pide, "teniendo en cuenta las leyes internacionales y españolas", la libertad condicional para los trece presos con "enfermedades graves e incurables" para que reciban "los tratamientos de salud necesarios en las condiciones convenientes y que esta situación no suponga una condena añadida para ellos y sus familiares". Asimismo, contempla el traslado del acuerdo municipal al Ministerio del Interior y al juez de Vigilancia Penitenciaria.