El Laboratorio de Biología y ADN de Policía de Andalucía Oriental, que tiene su sede en Granada y que trabaja además para las provincias de Almería y Jaén, ha analizado desde que fuera inaugurado en julio de 2010 un total de 700 pruebas, que han esclarecido 95 delitos, entre robos con fuerza, homicidios, delincuencia organizada o agresiones sexuales gracias a la obtención del perfil genético de los presuntos autores.

Las instalaciones nacieron con un sistema de calidad basado en la norma ISO 17025, para la acreditación ante la Comisión Nacional para el Uso Forense del ADN, y recientemente, en junio de 2012 superó la inspección de la Entidad Nacional de la Acreditación (ENAC), que en agosto de este año le concedió la certificación que faculta al laboratorio para la realización de informes periciales de ADN ante la justicia. Así, a partir de ahora, el de Granada no tendrá que contar con la supervisión del Laboratorio Central de Madrid para la elaboración de sus informes.

Así lo ha explicado en una entrevista con Europa Press el jefe de la Brigada de Policía Científica de Granada, Juan Pérez Peinado, que ha indicado que el Laboratorio podrá también atender a la provincia de Málaga cuando aumente su plantilla —actualmente formada por siete personas— e incorpore un nuevo secuenciador que permita realizar más pruebas de ADN de forma simultánea, previsiblemente para comienzos del próximo año, según ha establecido la Comisaría General de Policía Científica.

El "reto" al que se enfrentaba el Laboratorio era disminuir el tiempo de respuesta en los análisis de ADN. Actualmente, desde que se recogen los vestigios biológicos hasta que se consigue el perfil genético, transcurre un plazo de entre 10 y 15 días, cuando anteriormente, debido a la acumulación de asuntos en Madrid, se tardaba casi un año en concluir cualquier informe pericial para los juzgados.

En opinión de Pérez Peinado, las pruebas de ADN son "concluyentes" en el esclarecimiento de los delitos más graves a los que se enfrenta la Policía, y el hecho de contar en la capital granadina con el Laboratorio ha aumentado "considerablemente" la eficacia de la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Oriental en la identificación de cualquier autor del hecho delictivo de los que se recoge en la Ley de ADN.

De hecho, el jefe de Brigada ha puesto como ejemplo el esclarecimiento de la agresión a una joven que tuvo lugar a principios de año en Granada capital, en la calle Horno de Marina, que se ha producido por la identificación por ADN del presunto autor, ya que la analítica concluyó que la víctima presentaba dos perfiles genéticos, el suyo y el del agresor, transferido al intentar defenderse.

El Laboratorio, que ocupa una de las alas de la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Oriental, cuenta con la última tecnología para el análisis de pruebas biológicas. Una sola célula desprendida del cuerpo humano permite a los investigadores obtener un perfil de ADN.

Cuenta con un total de 12 dependencias, las que le ha exigido la ENAC para evitar la contaminación de las pruebas, y cumplir los estándares de calidad previstos por la Unión Europea, con la que además ha unificado el número de indicadores necesarios para compartir las bases de datos de todos los países integrados en Europol.

De esta forma, los secuenciadores obtienen 17 indicadores —suficientes para la identificación— para el análisis del ADN no codificante —el codificante, que podría concretar la raza, o el color de los ojos de la persona, está prohibido por la Ley de ADN—.

Además del registro y el almacén de las pruebas, las instalaciones cuentan con una sala de oscuridad total para la visualización mediante el sistema de 'crimescope', con luz ultravioleta a diferente longitud de onda, de los restos biológicos, varias salas de extracción orgánica de ADN y purificación por filtración, y frigoríficos para la conservación, a unos 80 grados bajo cero, de los perfiles durante un periodo de cinco años, tal y como establece la Ley.

El director técnico del Laboratorio es el inspector Juan Manuel García, licenciado en Química y con las funciones de jefe de Laboratorio, que trabaja en las instalaciones con otras seis personas más: un oficial, licenciado en Biología, responsable de calidad y especialista; cuatro policías, licenciados en Biología y Química, como especialistas; y un agente más como auxiliar de analista.

Antes de comenzar sus actividades en el Laboratorio de Granada, los funcionarios de la Policía Científica de Granada asistieron en Madrid y A Coruña a cursos de formación en sus respectivos laboratorios, para ampliar sus conocimientos prácticos y aprender las técnicas y sistemas de actuación propios de este tipo de centros. El personal del Laboratorio de Granada está en "continua actualización", porque la tecnología de análisis del ADN está en perpetua evolución, y continúa formándose e impartiendo también cursos a otros agentes.