La Fundación Cajamurcia mantiene una asidua colaboración con la Universidad de Murcia, a la que ha destinado más de siete millones de euros, desde 2005, con la finalidad de apoyar las actividades formativas, culturales y de investigación científica que desarrolla la institución docente.

En 2012, el apoyo de Fundación Cajamurcia se ha concretado, entre otras iniciativas, en la suscripción de un convenio por importe de 102.000 euros con la finalidad de sufragar actividades culturales organizadas por el Servicio de Extensión Universitaria y a otras actuaciones, según ha explicado la Fundación en comunicado.

De entre ellas, destaca que unos 20.000 euros se emplearán en las actividades de desarrollo estratégico y de formación que organiza la Universidad del Mar, mientras que también se han dedicado 8.000 euros para el mantenimiento del Acuario que la Universidad de Murcia tiene en las instalaciones del antiguo Cuartel de Artillería.

Además, con el objetivo de fomentar el empleo y una mejor formación de los estudiantes, la Fundación Cajamurcia dedicará otras colaboraciones a la Escuela de Práctica Jurídica, a las becas de excelencia para alumnos de Bachiller y a las Jornadas de Economía Industrial, organizadas por la Facultad de Economía y Empresas.

Durante los últimos siete años, la Fundación Cajamurcia ha apostado por apoyar la labor de la Universidad de Murcia, consciente del papel que ésta desempeña en la evolución de la sociedad, permitiendo la capacitación de los jóvenes y proporcionándoles una mejor formación y cualificación, lo que se contempla como una de las mejores fórmulas para luchar contra la actual crisis económica.

En este sentido, destaca el programa de becas de investigación, al que la Fundación Cajamurcia ha destinado más de 1,6 millones de euros y que está dirigido a ofrecer a los jóvenes la oportunidad de mejorar su desarrollo profesional, a través de una formación de calidad.

Otra de las iniciativas más interesantes que se han puesto en marcha, como fruto del acuerdo entre la Universidad y la Fundación Cajamurcia, ha sido el desarrollo de la tarjeta inteligente, un proyecto basado en las nuevas tecnologías que ha dado respuesta a las demandas que exige la sociedad actual y, especialmente, el colectivo universitario.

De este modo, se han automatizado diversos servicios, como la identificación y control de accesos en los edificios universitarios, al tiempo que han permitido a los estudiantes disfrutar de descuentos comerciales e información acerca de determinadas actividades culturales.

Igualmente, la aportación de la Fundación ha hecho posible el desarrollo de proyectos agrícolas, biosanitarios y científico-tecnológicos. Esta colaboración histórica se ha traducido en la promoción de la investigación en distintas áreas de interés para la Región de Murcia, como las realizadas sobre el tema del agua, un bien escaso y muy demandado en esta comunidad autónoma.