Los agentes de la Brigada de Patrimonio y de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta que investigan la desaparición del Códice Calixtino seguirán desplegados en Galicia "por lo menos un par de semanas más", según han informado a Europa Press fuentes de la investigación.

Aunque desde el punto de vista operativo la operación se da por terminada, los agentes desplazados desde Madrid se centrarán ahora en analizar toda la documentación recabada y en realizar las comprobaciones necesarias para determinar el origen exacto del dinero incautado a Manuel F.C., el electricista que ha confesado el robo del manuscrito del siglo XII.

Entre los documentos intervenidos, además de ediciones facsímil —una del Libro de las Horas y de otras diez del propio Códice Calixtino—, los agentes hallaron varios manuscritos de puño y letra del electricista. Precisamente, la Policía confía en que estas notas, que están siendo analizadas, serán "muy esclarecedoras" tanto sobre los robos perpetrados por el extrabajador de la Catedral como sobre la procedencia del dinero que se encontró en varias propiedades suyas.

Al margen de lo que encuentren en más registros que están previstos para las próximas jornadas, la Policía ya se ha incautado de 1,2 millones de euros, de 300.000 euros y de una cantidad de pesetas cuya procedencia exacta aún está por determinar. La principal hipótesis por el momento es que procedan de sustracciones continuadas y prolongadas en el tiempo, ya que el electricista trabajó durante 25 años en la Catedral y, además, una vez despedido, seguía acudiendo a diario al templo y disponía de copia de llaves de diversos puntos de la seo.

En cualquier caso, las fuentes policiales consultadas ratifican que el móvil del robo del Códice Calixtino es la venganza, ya que "si hubiese ánimo de lucro, se hubiese desecho de él", pero no se pudo verificar "ningún contacto" comercial para intentar venderlo. Además, se determinó que el manuscrito fue depositado desde el principio en el mismo sitio: un garaje del electricista ubicado en Milladoiro, localidad cercana a Santiago de Compostela.

Lo robó el 4

De julio de 2011

En su confesión de este jueves ante la Policía, sólo unas horas antes de pasar a disposición judicial y después de dos días negándose a colaborar, Manuel F.C. ratificó que robó el Códice Calixtino el 4 de julio de 2011 —un día antes de que se denunciase su desaparición—, en torno a mediodía.

Las fuentes policiales consultadas insisten en que llevaban "tiempo" centrando sus sospechas en este electricista y que lo sometieron a controles "de día y de noche", pero puntualizan que "una cosa es la sospecha y otra la detención", puesto que "el Códice podría correr peligro" si precipitaban los movimientos.

Así, estas fuentes rebaten las críticas del Sindicato Unificado de Policía (SUP), que ha pedido explicaciones porque el autor del hurto ya había sido identificado tres días después de conocerse la sustracción del Códice. "Esas críticas incluso con miras semipolíticas revelan un pleno desconocimiento de la operativa de una investigación tan delicada", rebaten.