La Policía Local de Santa Cruz de Tenerife ha detenido a un joven de 28 años de edad por incumplir los términos de una orden judicial de alejamiento, que le impedía estar a menos de 250 metros de su expareja de 22 años.

Los agentes habían acudido al lugar de los hechos —una céntrica calle de la capital— tras recibir un aviso telefónico que alertaba de un posible episodio de violencia de género.

Al llegar al lugar, la Policía observó en plena calle a dos mujeres y un hombre que coincidían con la descripción física facilitada por el alertante. El detenido fue encontrado por los agentes con síntomas evidentes de haber consumido alcohol y manteniendo una actitud de cariño con una de las muchachas.

Al proceder a la identificación de todos ellos, la chica que estaba junto al detenido facilitó datos falsos sobre su identidad y su estado de nerviosismo hizo que los agentes dudasen de esa filiación. Tras las oportunas comprobaciones e incluso el registro del bolso de la mujer, se detectó que su identidad era otra.

Al contrastar sus datos se descubrió que el detenido tiene en vigor una orden de alejamiento de esta chica desde el pasado mes de marzo, no pudiendo estar a menos de 250 metros ni comunicarse con ella. El hombre fue llevado a un centro de salud y luego a las dependencia policiales.