El consejero de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Luis Planas, ha hecho un llamamiento al sector oleícola andaluz para iniciar un proceso de concertación que permita a Andalucía defender una postura conjunta, ante el Gobierno de la Nación y ante la Unión Europea (UE), en relación con el Plan de Acción para el Aceite de Oliva, presentado esta semana por el comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, ante los principales países productores de aceite de la UE.

En declaraciones a los periodistas, Planas, quien ha asistido este viernes en Baena (Córdoba) el acto de entrega de los XIX Premios a la Calidad de la Denominación de Origen Baena de aceite de oliva, ha explicado que hay tres aspectos a tratar en relación con el citado Plan, como el referido a "la reestructuración del sector, de la interprofesional", siendo en este ámbito "importante dar un mensaje de unión", como también lo es "concentrar la oferta" e, igualmente, "es importante mejorar las condiciones en las cuales nuestros agricultores sitúan el producto, para aumentar sus rentas".

Junto a ello, Planas ha abogado por "desarrollar la promoción", ya que "se está haciendo bien, pero hay inclusive que mejorarla y disponer de más medios para llevarla adelante y, finalmente, es muy importante que nos planteemos, de forma seria y rigurosa toda la problemática de la calidad y de los controles, que son una garantía de nuestro producto para continuar adelante, conquistando nuevos mercados emergentes y desarrollando una de las producciones que hoy en día son seña de identidad de Andalucía".

En definitiva, el consejero de Agricultura quiere analizar el referido borrador del Plan de Acción para el Aceite de Oliva, junto con el sector, al objeto de presentar ante el Ministerio de Agricultura y ante Europa una posición fuerte, para que el texto final del Plan responda a lo que quiere Andalucía. Para ello, la concertación que pretende Planas se llevará a cabo en tres líneas, la primera en el ámbito interprofesional, en cuanto al fortalecimiento de los mecanismos de participación del sector en la toma de decisiones, mientras que la segunda y la tercera líneas estarán dirigidas, respectivamente, al análisis de la producción y a la calidad.

El plan de acción

En cuanto la redacción final del plan que presentó en Luxemburgo el comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, y que incluye propuestas para incrementar el control de la calidad y la promoción, reestructurar el sector y mejorar la competencia, España y los otros siete países productores de aceite de oliva de la UE (Eslovenia, Malta, Grecia, Chipre, Francia, Portugal e Italia) podrán proponer "en las próximas semanas" sus ideas y "mejoras" a dicho plan de acción a medio y largo plazo que la Comisión Europea plantea para apoyar al olivar ante la caída de los precios, que afecta especialmente a los productores españoles. El objetivo es que la versión definitiva del plan esté lista el próximo mes de julio.

Así lo anunció ya el propio comisario de Agricultura, quien ha reconocido que el problema del olivar no se limita a circunstancias coyunturales, sino que se debe a un desequilibrio "estructural", por lo que las ayudas al almacenamiento privado activadas hasta en tres ocasiones este año no han tenido el efecto esperado de recuperación de los precios.

Así las cosas, el plan ideado por el Ejecutivo comunitario se centra en cinco ejes: calidad y control, reestructuración del sector, estructura de la filial, promoción y competencia con los países terceros.

En materia de calidad, Bruselas apuesta por "reforzar los controles y las sanciones para combatir y desincentivar el fraude, en especial con la mezcla de distintas categorías" y por impulsar a nivel internacional la adopción de parámetros de calidad "más estrictos".

Las nuevas tecnologías permiten detectar los aceites calificados "ilícitamente" como virgen, un fraude que afecta en especial a los productores de calidad porque es competencia desleal y que es una "trampa" hacia los consumidores, según señaló Ciolos.

El comisario plantea otras iniciativas como mejorar el etiquetado del aceite, para que los consumidores tengan una mejor información y para "poner en valor" su calidad, pero también pide a los gobiernos y a la industria que "reflexionen" sobre una posible nueva clasificación más clara en cuanto a las distintas calidades, porque más allá del aceite virgen y virgen extra, el resto queda englobado en un abanico "muy amplio, con un poco de todo, incluidas las mezclas".

Otra idea tiene en cuenta el desequilibrio de fuerzas en la cadena de suministro y anima a concentrar la oferta de productores y transformadores para "aumentar el poder de negociación" con la gran distribución. Para ello, Ciolos plantea usar los fondos de desarrollo rural para apoyar medidas que favorezcan el reequilibrio, por ejemplo, favoreciendo los apoyos a quienes se unan en "inversiones colectivas".