El canto de un gallo tiene en vilo a los vecinos de Garbinet

Los residentes de este barrio denuncian que el animal los mantiene insomnes. Se ha abierto un expediente sancionador.
Los residentes del barrio de Garbinet padecen desde hace meses una peculiar contaminación acústica: la que provoca el canto de un gallo doméstico al alba.

«A las seis de la mañana se pone a cantar y nos despierta a todos los vecinos que estamos durmiendo», ha señalado José María Basauri, presidente vecinal de Garbinet.

«Es más, se ven de vez en cuando gallinas sueltas por la calle, y la Policía no hace nada por evitarlo. Pertenecen a familias gitanas, pero no queremos problemas», ha añadido Basauri.

Pese a que Juan Zaragoza, concejal de Sanidad, ha apuntado que «hay en marcha un expediente sancionador contra los propietarios de estas gallinas, que no pueden tener estos animales en esas pésimas condiciones higiénico-sanitarias; ya nos hemos incautado varias gallinas en ese barrio». El presidente vecinal de Garbinet ha comentado que «la situación se mantiene igual; aquí la Policía hace tiempo que no viene».

Por su parte, Luis Concepción, edil de Seguridad, ha reconocido que los agentes «han levantado allí ya varias actas antes por posesión ilícita de animales, tras una denuncia que nos hicieron los vecinos antes del verano. Pero ahora todo lo lleva la Concejalía de Sanidad».

Zaragoza no descarta que las gallinas y gallos «hayan vuelto a aparecer por el barrio. Entonces habrá que actuar de nuevo contra los propietarios».

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