Empieza el encierro de las lavadoras

La plantilla de Domar inició ayer una protesta contra los despidos. Se han preparado para vivir en la fábrica.
Encierro de trabajadores de Domar, ayer. (Laura Mangas / Acn)
Encierro de trabajadores de Domar, ayer. (Laura Mangas / Acn)
Encierro de trabajadores de Domar, ayer. (Laura Mangas / Acn)
Los 330 trabajadores de la empresa de lavadoras Domar iniciaron ayer una huelga indefinida. La totalidad de la plantilla secundó la protesta, cuya acción más visible es el encierro de los empleados en la planta de Martorelles. Con las tiendas de campaña plantadas, las sombrillas, las mesas, las sillas y las provisiones, el colectivo está preparado para vivir allí durante el tiempo que haga falta hasta que les escuchen.Los trabajadores reivindican mejores condiciones de despido para los 204 empleados afectados por el Expediente de Regulación de Ocupación (ERO), presentado por la la empresa en julio después de retirar en junio otro que afectaba a 102.

Los administradores concursales ofrecen indemnizaciones de 45 días de salario por año trabajado, con un límite de 24 mensualidades, mientras que los sindicatos fijan el límite en 42 mensualidades como condición para abandonar la huelga. De momento, el encierro va en serio y se combina con otras acciones de protesta, como la concentración que protagonizaron ayer en la Avinguda Diagonal delante de las oficinas de los administradores.

Domar fue comprada por los propietarios de Taurus al grupo italiano Antonio Merloni en junio de 2004. Fuentes de la empresa indicaron que su propuesta de indemnizaciones es «firme», mientras que los sindicatos la consideran «inaceptable».

Los representantes de los trabajadores aseguraron que su protesta es «una llamada a la sociedad, a la administración y a los jueces concursales para que eviten que los propietarios de la empresa se enriquezcan a costa de cerrar la planta».

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