Por ello y porque la comunidad lidera la lista nacional de siniestralidad (con casi 80 muertos en lo que va de año y con 114 fallecidos en 2005) se comprometió a elaborar, de manera conjunta con la Xunta, «medidas de control» para reducir la mortalidad en las carreteras gallegas, donde ni el carné de conducir por puntos parece hacer hecho efecto.

Durante este pasado fin de semana negro para los conductores, las urgencias sanitarias del 061 tuvieron que atender a 119 personas en Galicia. La mayoría de los de los implicados eran hombres y el 25,6% tenía una edad comprendida entre los 15 y los 24 años. De hecho, tan sólo el 36% de los fallecidos fueron mujeres.

A pesar de que la siniestralidad afecta a todas las provincias, el primer puesto lo ocupa Pontevedra, con 38 accidentes este fin de semana. En el lado opuesto está Ourense, donde se registraron cinco siniestros. A Coruña y Lugo sufrieron 29 y 13, respectivamente.

Con estas cifras, las muertes en las carreteras gallegas se igualan a las del pasado fin de semana. Y la tendencia parece no querer cambiar. Tan sólo el fin de semana de estreno del carné por puntos (que coincidió con la operación salida de julio) hubo una víctima mortal aquí.

Las víctimas siguen

Ayer, un hombre falleció en Frades (A Coruña) en una colisión por alcance entre dos camiones y  otro resultó herido de gravedad.

Hoy, jornada festiva en toda Galicia, Tráfico incrementará sus controles en las vías más transitadas y en las zonas de costa.

Trasladados al hospital

Los centros hospitalarios ganan la partida a los centros de salud o puntos de atención primaria en cuanto a atención de heridos en las carreteras se refiere. De hecho, de los más de 100 atendidos este fin de semana, 94 fueron trasladados a hospitales y 12 a centros de salud. Además, los servicios de emergencias atendieron ocho lesionados en el propio lugar del incidente. A pesar de todo, los servicios sanitarios no pudieron hacer nada por salvar la vida de cinco personas, que fallecieron en el lugar del siniestro.