Hablar de picassos inéditos puede parecer casi una broma, tratándose de un pintor mundialmente conocido y explorado. Pero en Antibes, una población del sur de Francia en la que el malagueño estuvo afincado y creó parte de su producción artística más alegre, colorista, mediterranea y llena de alegría de vivir, guardan obras que nunca han salido de esta población y que desde hoy, de forma inédita, se exhiben en Barcelona en la nueva exposición Els picassos d’Antibes.El Museu Picasso reúne 88 obras, cinco menos que en la misma exhibición que se pudo ver previamente en Málaga, la ciudad natal del genio. Las obras las realizó Picasso en el Castillo Grimaldi de Antibes en 1946. En este lugar estuvo alojado y, en las piezas, Picasso utilizó técnicas nunca vistas en el mundo del arte, como el uso de materiales para la construcción. Maite Ocaña, actual directora del Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) y antes del Museu Picasso, es la comisaria de esta muestra. En las obras de Antibes, Picasso se reencontró con los temas mitológicos y de la naturaleza.