El entrenador del FC Barcelona, Pep Guardiola, no ha querido entrar a valorar los acontecimientos sucedidos en el partido entre Villarreal y Real Madrid el pasado miércoles. Asegura que no vio el partido-"porque la gente tiene familia"-, y por tanto no ofrece su opinión. Respecto al silencio de los blancos, considera que cada uno hace lo que siente: "no me voy a meter donde no me llaman, no estoy aquí para dar lecciones", ha reconocido.

Joaquín Caparrós y el Mallorca ponen a prueba la capacidad de reacción y persecución del FC Barcelona, un partido que Guardiola se toma muy en serio por el carácter de su entrenador. "Caparrós deja su sello en cada equipo. Es un equipo intenso, ambicioso y dinámico", ha asegurado.

Después de recalcar en dos ocasiones que el Barça no ganaría la Liga este año, el entrenador azulgrana no varía demasiado su discurso. Considera que seis puntos son muchos, y más conociendo al rival. "El Madrid gana mucho, no podemos pretender que vayan a empatar cada día. Van a empezar a ganar ya, y seis puntos son muchos puntos", ha manifestado. "Mejor que empaten a que no ganen, estoy más contento que si hubieran ganado".

La diferencia entre Madrid y Barça se ha visto reducida cuatro puntos en apenas una semana, lo que no provoca un cambio en su mentalidad de ir partido a partido. "Cuando había diez puntos de diferencia también salíamos a ganar, y es lo que vamos a hacer ante el Mallorca. Ganar a todos los rivales no es una tarea fácil, tenemos que centrarnos porque tenemos partidos contra equipos que se juegan muchas cosas: descenso, Champions..."

"Somos el FC Barcelona y lo importante es hacer bien las cosas. Eso suele dar resultados. No tenemos que bajar los brazos, debemos seguir intensos. Tenemos tres títulos e intentaremos ganar alguno más. Esperamos optar a títulos a final de temporada", ha concluído.