Por su parte, CC OO ha mostrado su preocupación por aquello de que no se esté cumpliendo el refrán «vísteme despacio que tengo prisa». El sindicato señaló que ha denunciado los ritmos de trabajo y la aglomeración de maquinaria con la que se está edificando el complejo ante la Inspección de Trabajo. Teme que el empujón cause otro accidente laboral (hubo uno en mayo, cuando un obrero de 27 años resultó herido grave al caerle una parte de un muro).
La Junta dice que las cuatro empresas encargadas del proyecto trabajan mañana, tarde y noche para compensar al retraso por la huelga de canteras a principios de año.
¿Quién paga la obra?
Todos y a partes iguales: Gobierno central, Junta y Ayuntamiento aportan 3,6 millones de euros cada una.
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