La caída de la inversión pública motivada por la crisis económica ha afectado notablemente a los ingenieros de caminos, canales y puertos, industriales y agrónomos, especialmente el descenso de las partidas para infraestructuras, que ha incrementado del 0 al 10 por ciento el paro entre los ingenieros de caminos desde 2006 tanto a nivel autonómico como estatal, según ha señalado este martes la decana del colegio oficial del ramo, Mercedes Aviñó.

En rueda de prensa, Aviñó ha señalado que desde el colegio estatal exigen "un mínimo de inversión en infraestructuras, aproximadamente un 10 por ciento de la inversión pública total".

Por su parte, los ingenieros industriales también han notado tanto los efectos del descenso de la aportación industrial al PIB del 20 al 10 por ciento en la última década, como los derivados de la crisis actual, con la incorporación a sus bolsas de trabajo de profesionales "muy cualificados y con mucha experiencia" que se unen a los recién egresados que buscan su primer empleo. Así lo ha confirmado su decano, Javier Turégano, quien ha minimizado el impacto de la marcha de estos profesionales a otros países porque en casos como Alemania "hay más ruido que nueces" y "tampoco es tanto como se dice".

El decano del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Levante, Baldomero Segura, ha precisado que la mayor incidencia de la crisis recae en quienes buscan su primer trabajo por cuenta ajena, aunque "gente muy preparada" también se ha visto abocada al paro y "algunas ingenierías" se han visto inmersas en "procesos de reestructuración laboral bastante importantes". Además, han sufrido la caída de inversión pública en las ayudas en el ámbito industrial y agrario.

Segura ha resaltado que están "a la espera de ver cómo reacciona el sistema empresarial" ante ese descenso de la aportación pública y ha alertado de que "si no reacciona, el futuro va a ser bastante difícil para los ingenieros". "Si siguen vinculados a la posible ayuda de la administración, el panorama es muy negro", ha dicho.

Según datos de estos organismos colegiados, anualmente se titulan cerca de 330 ingenieros industriales, 220 ingenieros de caminos y 150 ingenieros agrónomos en la Comunitat Valenciana.

"perfectamente complementario" con las universidades

Los responsables de los tres colegios autonómicos han presentado la Plataforma de Formación Conjunta de la Ingeniería, un "cluster de servicio" inicialmente para sus 8.000 colegiados y más adelante para todos los ingenieros y demás profesionales interesados, que asegura ser "perfectamente complementario" con la formación universitaria.

De hecho, nace con el objetivo de "ofrecer una formación sólida, especializada, útil, práctica e innovadora" a los ingenieros que "quieran estar al día de las nuevas tecnologías y los nuevos procesos productivos", a través de un sistema de cursos compatibles con su trabajo que busque los "huecos" más adecuados, mientras que las universidades se centran en "la parte científica" de la profesión.

Segura ha remarcado que ni pueden ni quieren competir con la oferta formativa de las universidades, que "es fundamentalmente generalista, no tan práctica" como la impartida por los colegios sobre cuestiones como la normativa o la buena práctica deontológica.

Por su parte, Turégano ha argumentado que, "no es sostenible que un recién egresado de la universidad tenga competencias profesionales de por vida ya porque sí", sino que "se debe de actualizar permanentemente". Además, ha reivindicado que en las universidades también "se debería enseñar emprendimiento" porque "el ingeniero debe ser emprendedor" y en la actualidad eso "no se enseña" en la carrera.

Por su parte, Aviñó ha apuntado la necesidad de contar con "equipos multidisciplinares" en un contexto en el que se camina hacia la gestión de las infraestructuras y del servicio que ofrecen y en el que, además, todas las decisiones de inversión "deben estar justificadas desde el punto de la vista de la rentabilidad, de la financiación posible, medioambiental y de servicio a la sociedad".

En este punto, ha defendido que esa formación específica unida a la experiencia del sector puede facilitar el acceso a proyectos de grandes infraestructuras en el exterior, en un momento en que las grandes empresas constructoras españolas tienen ya el 80 por ciento de su negocio fuera de España y las medianas el 50 por ciento.

También han valorado su apuesta por la interlocución con la administración y, en concreto, Turégano ha aseverado que pueden "colaborar eficientemente" en los "retos" de "búsqueda de eficiencia y adelgazamiento de estructuras" a los que se enfrenta. Preguntados por los impagos, han remarcado que los colegios no perciben "ningún tipo de ayuda" aunque sus colegiados sí han sufrido esos "retrasos" de pago e incluso se han visto inmersos en EREs y despidos.

Participar en el sistema de acreditación profesional

Por otro lado, Segura ha indicado que se ultima la creación de un "sistema de habilitación profesional vinculado a los colegios" que surja "de momento como un sistema privado y voluntario" para acreditar que los ingenieros cumplen "todos los requisitos" adecuados a las necesidades del sector aparte de tener el título. "Estamos trabajando en ello y no nos falta mucho", ha apostillado Turégano.

Los tres decanos han aludido, en este sentido, a los distintos modelos de habilitación profesional existentes a nivel internacional, que van desde el sistema español que se limita al título académico a un modelo mixto o a otro "absolutamente libre" como en Reino Unido, donde el título universitario no otorga la habilitación para trabajar, sino que ésta compete a una entidad que debe acreditar su formación, especialización y experiencia, entre otros requisitos.