El diputado de Nueva Canarias (NC)-CC en el Congreso Pedro Quevedo ha criticado este martes al Gobierno de Mariano Rajoy de medir a las autonomías por el "color político", en relación a la reunión convocada por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para analizar la financiación autonómica primeramente con los consejeros de PP.

"Sólo nos faltaba que el Estado de las autonomías fuese ahora medido por dos raseros, el rasero no es quien lo hace bien o lo hace mal, sino quien es de mi color político o quien no lo es. Si esto fuese así, en Canarias necesitamos urgentemente poner las orejas tiesas ante un futuro que sin duda no es halagüeno", apuntilló en rueda de prensa.

Ante estas "dos varas de medir" de Montoro, subrayó, Canarias debe hablar para que "alguien entienda en Madrid que Canarias no puede estar así". Además, señaló que el ministro canario de Turismo, José Manuel Soria, tiene la oportunidad para "echar una mano" al archipiélago porque, le recordó, que conoce la situación de las islas en cuanto a financiación autonómica, ya que Soria fue consejero de Economía y Hacienda en el Gobierno autonómico.

Quevedo consideró que Canarias "está en desventaja con las políticas de Estado históricamente" porque, aseguró, que el Régimen Económico y Fiscal "no se ha cumplido nunca".

Intervención de las comunidades

Por otra parte, Quevedo también se refirió a la intervención del Estado en las comunidades. A este respecto, indicó que existe un "afán" del Gobierno central de "entrar en una especie de clave intervencionista con las comunidades autónomas pero de una forma muy particular".

En este sentido, afirmó que su formación está de acuerdo que el Estado tenga que intervenir en las comunidades pero "cuando lo hacen mal" porque, prosiguió, "si la intervención es otorgarle 125 millones de euros a la Comunidad Valenciana, no se sabe bien por qué", entonces habrá que "sospechar que aquí va a ver comunidades de un tipo y de otro".

"La intervención está justificada cuando hay una lesión de las cuentas públicas. Las comunidades autónomas no son todas iguales, las que están haciendo sus tareas, que han controlado su déficit y que están intentando mantener la actividad de una forma razonable no pueden ser intervenidas y ponerlas en el mismo saco que aquellas que se han dedicado a dilapidar recursos. Comunidades que tienen un color político tradicionalmente", apuntilló.