El presidente de Cantabria, Ignacio Diego, ha señalado este viernes que la rebaja de la calificación de Cantabria por parte de la agencia Fitch "no es una buena noticia", pero ha subrayado que "en el marco de una noticia que no es positiva, el informe "da ilusión y es una noticia generadora de esperanza", en la medida en que Fitch "certifica que en Cantabria existe una nueva forma de gestionar los recursos públicos basada en la prudencia, el rigor, la responsabilidad y la estabilidad presupuestaria".

Tras puntualizar que Fitch es "la agencia a la que el Gobierno de Cantabria viene pagando desde hace años para que haga esa función", Diego ha destacado que en el informe en el que se notifica la rebaja de la calificación de Cantabria y el Instituto de Finanzas (ICAF), Fitch afirma y "valora muy positivamente" que el nuevo Gobierno "haya establecido como prioridad el control del déficit" para poder salir de la recesión.

Así, el presidente de Cantabria leyó textualmente algunas de las afirmaciones recogidas en el informe de Fitch, difundido este jueves por Europa Press, en concreto, que la rebaja en la calificación de la Comunidad Autónoma refleja "el deterioro de la ejecución presupuestaria en los últimos tres años en medio de la creciente deuda".

Y "para la satisfacción del actual Gobierno y de los ciudadanos de Cantabria que a tiempo han sabido cambiar de Gobierno", valora que el nuevo Ejecutivo regional ha adoptado un paquete de medidas adicionales de austeridad en un esfuerzo por cumplir con el objetivo de estabilidad, que equivale a un déficti del 1,3% del PIB regional.

En su informe, Fitch también apunta que la recuperación "será un proceso largo, y que estas medidas "pueden ser difíciles de implementar rápidamente". "Y lo más importante, la recuperación económica todavía débil, podría limitar el crecimiento de los ingresos fiscales aún más", añade la agencia.