El más sonado fue el de Michael Douglas y Catherine Zeta Jones; depués llegaron Tom Cruise y Katie Holmes, que acordaron que el actor tendría que indemnizar a su novia con 40 millones de dólares en caso de separación; pero seguro que ninguno ha causado tanto pavor a los millonarios británicos como las dos sentencias que fueron aprobada ayer por la máxima instancia de su país.

Según publica The Times, los abogados de familia ya están aconsejando a los jóvenes adinerados que es preferible que no se casen después de esta sentencia, que crea jurisprudencia.

Recompensar los sacrificios

En el juicio de divorcio más importante de Inglaterra, en los últimos 20 años, se ha creado unan ueva regulación que defiende que las mujeres que han sacrificado sus carreras cuidando su casa y sus hijos deben ser compensadas.

Según estas nuevas sentencias, una mujer puede pedir a su marido que comparta sus futuros ingresos y reclamar la tirularidad de todos los bienes obtenidos durante el matrimonio, por muy corto que sea éste.

Dos sentencias históricas

Las dos beneficiadas, y ahora famosas, ex esposas que han protagonizado sendos procesos han sido Melissa Miller, de 36 años, y Julia McFarlane, de 42.

Julia McFarlane, la más afortunada, ha conseguido que su marido, un prestigioso especialista en impuestos, le pase cerca de 370.000 euros al años, durante el resto de su vida.

Menos astrómica, aunque bastante considerable es la cifra obtenida por Melissa, que se quedará con 5 de los 17 millones de libras de la fortuna de su marido, es decir, que a partir de ahora habrá unos 7 millones de euros más en su cuenta corriente.

Disparidad de opiniones

Algunos piensan que esta medida va a disuadir a los jóvenes de que contraigan matrimonio.

No obstante, muchos han aplaudido esta medida y la han calificado de "victoria", ya que reconoce la contribución de cada cónyuje al matrimonio, en una nueva definición de "justicia".

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