El líder del Foro Democrático por el Trabajo y las Libertades (FDTL-Takatol), Mustafa Ben Yafaar, fue elegido más tarde presidente de la Asamblea Nacional Constituyente con el apoyo de 145 de los 215 parlamentarios que emitieron su voto.

La elección de Ben Yafaar, que competía con Maya Zribi, candidata por el Partido Democrático Progresista (PDP), que obtuvo 68 votos, no ha supuesto ninguna sorpresa. Ben Yafaar contaba con el apoyo del tripartito compuesto por su grupo, los conservadores islámicos del Movimiento Al Nahda y por el Foro Democrático por el Trabajo y las Libertades (FDTL-Takatol), que tienen 138 de los 217 escaños de la Asamblea.

Este martes está previsto también que el nuevo parlamento, surgido de las elecciones celebradas el pasado 23 de octubre, constituya la comisión para el reglamento interior de la Asamblea, que tendrá dos objetivos: reglamentar el funcionamiento de la Asamblea y fijar las prerrogativas del presidente del Estado y del Gobierno, que se elegirán en otra sesión aún no fijada.

Durante la inauguración de las sesiones, el presidente interino del país, Fuad Mebaza, que calificó el día de "histórico" aseguró que "hoy se inaugura la Segunda República que consagrará los principios de la revolución para rendir un homenaje a los jóvenes muertos en la revolución".

La principal alianza tunecina, encabezada por el grupo islámico conservador Al Nahda, anunció este lunes que había alcanzado un acuerdo sobre las personas que ocuparán la presidencia del país, la del Ejecutivo y la de la Asamblea Nacional Constituyente.

Según un documento firmado este lunes por los tres partidos que componen la plataforma, la presidencia del Estado será para en el líder del Consejo Por la República (CPR), Moncef Marzuki, la de la Asamblea Nacional Constituyente para Mustafá Ben Yafaar, del Foro Democrático por el Trabajo y las Libertades (FDTL-Takatol), y la jefatura del gobierno para el secretario general de Al Nahda, Hamadi Yabali.

El anuncio, que se realizó cuatro horas y media después de lo previsto, lo hizo Nuredin el Behiri, portavoz del grupo islámico conservador Al Nahda, y se produjo en la víspera de la inauguración de las sesiones de la Asamblea Nacional Constituyente.