Chaves, que compareció acompañado por la consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, explicó en rueda de prensa que la Junta ha ejercido su derecho de retracto al conocer sus servicios jurídicos que hubo una transmisión patrimonial en 1999 de la finca en la que se erige el hotel. Con esta operación, Chaves garantizó que el hotel no será inaugurado, ya que a finales de este mes o principios del próximo se consignará el dinero para hacer efectiva su compra, fijada en un total de 2,3 millones de euros.
Dicha compra incluye la finca colindante a la del hotel, lo que supone que a partir de ese momento será de titularidad pública.
El establecimiento hotelero, de 400 habitaciones repartidas en veinte plantas, no llegará a terminar de construirse.
A finales de año, después de que activistas de la ecologista Greenpeace protestaran en las inmediaciones del hotel, se publicó en el Boletín Oficial del Estado el deslinde de dominio público que afectaba a este paraje por el cual se hacía oficial la ilegalidad de la construcción.
Greenpeace expresa su "satisfacción"
La organización ecologista Greenpeace expresó hoy su "gran satisfacción" ante la noticia de la Junta sobre los terrenos donde la empresa Azata construía "ilegalmente" el hotel y calificó la noticia como "un victoria" sobre "el hotel ilegal".
En un comunicado, Greenpeace consideró que el anuncio efectuado por el presidente de la Junta, Manuel Chaves, en el que afirma que se va a restaurar la zona "constituye un primer paso en la buena dirección de la Junta de Andalucía desde que se inició su construcción".
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